La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos dejó de ser el instrumento de la sociedad para convertirse en un contrato particular que los partidos políticos han usado para determinar, negociar, precisar y condicionar sus posiciones e intereses de grupos, dijo Diego Valadés Ríos, en su conferencia titulada La Constitución de 1917 en el 2017.
“La Constitución Mexicana pasó de ser un contrato social a un contrato político entre los protagonistas de la política coyuntural, de ahí que es urgente reestructurarla para que sea el instrumento de las reivindicaciones sociales y de la consolidación de los derechos de la ciudadanía”, afirmó durante su participación en la Octava Semana Internacional de la Cultura Jurídica y la Paz, que organiza la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales (FDyCS) de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM).
Aseguró que “es necesario hacer un esfuerzo para revisar la Constitución y determinar ¿por qué se llenó de palabras? pasando de 22 mil a 66 mil, con 631 decretos de reformas constitucionales y modificada 699 veces, con los diferentes preceptos constitucionales resultado de la dinámica política de un régimen de un partido único y hegemónico en el gobierno por más de 70 años”.
Llamó a la reconstrucción del Estado y a darle una nueva sistematización a la Constitución, es decir, “reordenar su texto, que al cabo de un siglo perdió unidad; y segundo, introducir las reformas que ofrezcan a la sociedad verdadera equidad, acceso a la justicia y una democracia confiable”.
Estamos pagando las consecuencias de una Constitución hecha para un régimen estructurado con un sólo partido hegemónico y no para un momento en el que ya no existe esa hegemonía de ninguno de los partidos políticos, dijo, contraria a la presencia del pluralismo del sistema representativo en el gobierno, un hecho que se experimenta en todos los niveles de gobierno desde el municipal hasta el federal.
Diego Valadés dijo que la concentración del poder presidencial es arcaico, “pero la vida constitucional del país no se puede resolver por el cambio de personas en el gobierno, ni por la lucha entre individualidades debido a que es un problema sistemático que sólo se puede resolver mediante nuevas modalidades de organización en el poder de la Constitución".
Diego Valadés es doctor en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid, además de ser miembro de El Colegio Nacional, de El Colegio de Sinaloa, de la Academia Mexicana de la Lengua, de la Academia Mexicana de Ciencias, presidente del Instituto Iberoamericano de Derecho Constitucional y miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI).