Los tiempos de las promesas a cambio de votos han terminado, por lo que los que apuestan al continuismo se equivocan y cargarán con el rechazo de la gente; por ello, agregó Orihuela Trejo, el proyecto busca regresar a los principios básicos que dieron origen al PRI.
Acompañado de su compañera de fórmula Georgina Bandera, el diputado con licencia agradeció la adhesión a sus propuestas de más de cuatro mil yautepequenses, quienes al arribo del ex alcalde de Mazatepec al informe del diputado Julián Abarca Toledano, le manifestaron su simpatía y el compromiso de su voto el próximo 7 de noviembre.
Ante la multitud, Amado Orihuela insistió en que la demagogia no tiene más cabida en la actualidad, pues la gente que día con día construye Morelos exige políticas públicas y partidistas con rostro humano, ésa que sólo da la justicia social, y la que el PRI debe generar desde su cúpula y desde donde es gobierno y legisla.
Convocó al priismo a poner fin a la política errática, sin rostro humano, que tanto daño causa y redireccionar al Revolucionario Institucional hacia estrategias a favor de los que menos tienen a través de la gestión social.
El objetivo, precisó el también dirigente cañero, sólo puede cumplirse a través de la integración total al tricolor de líderes naturales, sociales y de jóvenes que hoy reclaman espacios, “son todos ustedes quienes merecen la oportunidad de estar al frente de cargos y no aquellos oportunistas que ven al PRI como botín político”.
Orihuela llamó a fortalecer sectores y corrientes partidistas con gente de los movimientos territoriales: “Deben ser los priistas, en sus municipios, los que determinen quiénes serán sus candidatos y no que por dedazo unos pocos decidan (…) La imposición de abanderados por compromisos políticos, compadrazgos o cacicazgos sólo trajo desgracia: perdimos la presidencia de la república y la gubernatura.
“Hoy, gracias a la unidad priista, hemos vuelto a ser la primera fuerza política nacional, y en el 2012 vamos a recuperar el gobierno morelense y el del país”, pero para ello, agregó el ex presidente municipal de Mazatepec, “debemos mandar a las elecciones a líderes que representen a todos y cada uno de los sectores de nuestro partido, de la sociedad”.
Sólo alguien surgido de entre las personas con capacidades diferentes, dijo Orihuela, puede entender, atender y resolver la problemática que les aqueja, al igual que un obrero, un campesino, un joven, una madre soltera, una viuda, un comerciante, un taxista, un anciano, un maestro, un estudiante o un desempleado, “y no quien desde atrás de un escritorio o encerrado en una oficina delinea políticas erráticas, sin rostro humano, sin sentido ni justicia social”.
Por ello convocó a la militancia priista a votar el próximo 7 de noviembre por un cambio de forma y fondo dentro del PRI, para así regresar a sus orígenes, a sus principios básicos y a ser un partido del pueblo, “porque sólo con liderazgos naturales, el PRI volverá a su política con rostro humano, a su política que le dio vida, la de la justicia social”, concluyó Amado Orihuela.
Antes, en Temixco, donde sostuvo un desayuno de trabajo con unas 400 personas, Amado Orihuela y Georgina Bandera sostuvieron que el triunfo de la democracia, del cambio y de la refundación está próximo, tan cerca como el 7 de noviembre en que sus seguidores con el voto de la razón decidan la renovación del PRI. "Los tiempos del continuismo y de los compadrazgos se terminaron", puntualizaron Orihuela y Bandera.