Niegan que exista división en grupos internos y exigen la conformación de una comisión plural.

Integrantes de la organización Bases de Morena Morelos presionarán para que Gerardo Albarrán Cruz renuncie al cargo de presidente del partido en la entidad y para que se nombre una comisión plural. 

Aunque Francisco Radilla Corona, su anterior vocero, había explicado que por ley ya no hay posibilidad de cambios en las dirigencias partidistas, este martes, integrantes de la disidencia expusieron que no aceptarán su permanencia en ese puesto.  

Negaron que haya división dentro de ese grupo interno o que se hayan radicalizado, al sostener que se mantienen en la demanda de que se aplique una auditoría sobre el manejo de los recursos del instituto político. 

Alberto Castañeda Sánchez, secretario de Organización de la agrupación, aseguró que Albarrán Cruz fue nombrado en su momento,  “como secretario, no como presidente”. Argumentó que la legislación electoral permite cambios ya iniciado el proceso electoral, si algún integrante renuncia o muere. 

Por lo tanto, los inconformes exigen que por "acuerdo político" con la directiva nacional se presione a Albarrán Cruz a renunciar y que se nombre una comisión plural, en la que participen los diversos grupos de morenistas.  

Asimismo, insisten en que no quieren que Albarrán Cruz y el grupo del expresidente Rabindrantah Salazar Solorio (quien ahora es subsecretario de Gobernación) tenga participación alguna en la designación de candidaturas para este proceso electoral. 

Mencionaron que podrían aceptar que el resto del comité directivo estatal se quede e incluso comentaron que en el consejo político estatal podrían iniciar el proceso de renovación de la directiva.