En entrevista con La Unión de Morelos, el candidato del PSD y el PAN expone sus propuestas estratégicas para gobernar Cuernavaca

Al sostener que en este momento del proceso electoral la competencia real se centra entre dos aspirantes, José Luis Urióstegui Salgado candidato a la alcaldía de Cuernavaca por los partidos Acción Nacional y Social Demócrata, llamó al voto útil a favor de su propuesta en la que ofrece un gobierno con arraigo, capacidad y con honestidad.

En todas las encuestas que han circulado -independientemente de a quién le den mayor o menor porcentaje en el primer lugar- se observa una constante, y es que la gente que ya tiene una intención del voto.

Mayoritariamente está por el candidato Urióstegui Salgado o por Jorge Argüelles Victorero de la coalición compuesta por Morena, Encuentro Social y Nueva Alianza y a decir del aspirante, el 60 por ciento de la intención se centra en estas dos opciones.

Urióstegui Salgado aseguró que el resto de las y los aspirantes están muy alejados de una posición competitiva, con pocas posibilidades de ganar, de tal manera que aun cuando sientan empatía ese voto se vuelve poco eficaz. En este sentido, insistió en la convocatoria a un sufragio “útil”, para poder impulsar “un plan que tiene identidad morelense, que responde a los valores de la gente de este municipio, con una persona con capacidad de respaldarlo”.
Honestidad

Para el abogado, quien ha ocupado diversos cargos en la administración pública en Morelos -como el de juez penal, agente del ministerio público, director de la policía municipal, subsecretario de Gobierno y titular de la entonces Procuraduría de Justicia- es un factor de confianza para la ciudadanía. “Me quedaré, como ha sucedido, soy parte del escenario de Cuernavaca, quienes aquí vivimos salimos a caminar a la calle, nos conocemos, no tengo intereses en otro lugar, mi desempeño profesional está aquí en Morelos”.

Dijo que muchos aspirantes llevan como bandera de campaña el combate contra la corrupción, pero que en su caso su trayectoria lo demuestra. En su desempeño en el servicio público, el abogado Urióstegui recuerda un episodio pocas veces visto, cuando como titular de la ahora Fiscalía General del estado, antes Procuraduría, decidió renunciar al cargo y denunciar públicamente que había pruebas de complicidad entre el Ejecutivo estatal y grupos delictivos.

José Luis Salgado fue designado en el año 2000 como procurador con voto unánime del Congreso local. Explicó que en su gestión se realizaron varias acciones para sentar las bases para institución sólida; enumera la creación de una dirección de evaluación y planeación; otra de bienes asegurados, la apertura de un corralón para resguardar vehículos robados, la coordinación de información criminógena, entre otras acciones que indicaban que iba por buen camino.

Sin embargo, narró el candidato, la ley no establecía con claridad quién designaba a los mandos subalternos del otrora procurador, por lo que el entonces gobernador, nombró como coordinador de la policía al tristemente recordado Agustín Montiel López, quien años después fue encarcelado, vinculado con la delincuencia organizada.

Tras diversos incidentes, como la detención de un diputado federal en el Congreso, y una comparecencia en la que los legisladores que lo nombraron le cuestionaron más que al entonces comandante policiaco, el abogado decidió renunciar y hacer pública la causa de su separación del cargo el 31 de enero del 2002. “Si no soy útil no tengo nada que hacer ahí, no tenía caso arriesgar la vida y la de mi familia, no podía servir al estado… no fue el temor, fue mi deber con Morelos” asegura.

La seguridad es un tema crucial en el proyecto del candidato, que hace tres años buscó ser candidato independiente y que ahora es abanderado por el albiazul y el partido del corazón.

Explicó que su propuesta de usar drones para la vigilancia forma parte de un proyecto integral, en el que además se usarán cámaras de videovigilancia. “Ya sé que hubo hasta memes y me gustó alguno”, dice entre sonrisas.

Agrega que a los ayuntamientos les corresponde la prevención del delito y eso es generar condiciones para que la delincuencia no actúe (una vez que se cometen delitos le corresponde a la Fiscalía). A la policía municipal le corresponde patrullar, vigilar, dar auxilio y custodiar bienes para generar cadena de custodia, pero también le toca generar interacción con la ciudadanía.

De ahí que se necesita -abunda- que la policía tenga información sobre dónde suceden los ilícitos. El proyecto es contar con drones y un sistema de cámaras de videovigilancia, de la mano con la participación ciudadana a través de la denuncia.

La utilización de la tecnología permitirá una reducción de costos económicos y humanos, porque son utilizables en barrancas, donde hay tráfico vehicular o en zonas en las que existe complicación para acceder en patrullas.

Esta propuesta, subrayó, se desprende del conocimiento del terreno de Cuernavaca y permite responder en minutos.

Recordó que en Cuernavaca existía un Centro de control y videovigilancia conocido como C3 que ahora está desmantelado y que en su mejor época contó con 54 cámaras.

Su estrategia -explicó- es crear 30 módulos de la policía en toda la ciudad, para reducir tiempos de reacción y abarcar más territorio en la vigilancia constante. El plan arrancará con diez drones, que además tendrán radares detectores de vehículos con reporte de robo.

Insistió en que este proyecto- presentado hace algunos días- prueba que la autoridad no está haciendo lo que le corresponde, pues en sólo cinco minutos se identificaron dos vehículos robados en una prueba sencilla.

“El robo de vehículos impacta en otros delitos, como el homicidio, cobro de piso, secuestros, porque se cometen en vehículos robados; si inhibes (este)… sensiblemente disminuirá la inseguridad. El primer paso (es) que la gente participe, que tomemos las calles, porque nosotros nos hemos retraído, nos hemos escondido en las casas” expresó.

Mucho ante de iniciar el proceso electoral en curso José Luis Urióstegui, junto con más ciudadanos de Cuernavaca, realizaron múltiples jornadas de trabajo comunitario, desde sacar basura de barrancas hasta plantar árboles y pintar guarniciones.

Al respecto, dijo que este plan va a continuar porque otro de los ejes del proyecto es generar identidad y comunidad. “Siempre hemos considerado que al ayuntamiento le corresponde hacerlo todo, hasta mandarnos un barrendero a limpiar nuestra casa, pero no estamos para desviar recursos del ayuntamiento con fines personales. Necesitamos una participación efectiva y coordinación de la ciudadanía con la autoridad”, explicó.

Ya se ha hecho como ciudadanos y ahora se buscará impulsar esta organización social: “queremos que Cuernavaca sea una ciudad limpia y ordenada, a partir del esfuerzo coordinado de la ciudadanía con la autoridad. Es decir, que puedes seguir un ejemplo y que más ciudadanos se integren desde sus colonias, queremos formar comunidad, que la gente se preocupe, que haga algo sin esperar nada y que lo que hacemos nos identifique.

Estas acciones llevan un proceso de limpieza, al orden y a la seguridad… tu observas a la gente y después de la jornada, ves el rostro de satisfacción”.

Tras sostener que el municipio merece un gobierno con identidad, honestidad, capacidad y arraigo, Urióstegui Salgado llamó a la ciudadanía a dar curso a su propuesta: “Cuernavaca es nuestra casa grande, debemos cuidarla, protegerla, que esta casa sea amigable, para que el turismo llegue, que las inversiones estén presentes y generen empleo… debe ser cuidada con buena imagen, la que corresponde a la amabilidad de quienes somos de aquí, a los guayabos”.