Veinte ayuntamientos siguen sin entregar y correr el riesgo de perder recursos federales.
La mayoría de los 16 atlas de riesgo entregados por el mismo número de municipios no han sido actualizados, pues el más recientes datan de 2018.
Este viernes, el titular de la Coordinación Estatal de Protección Civil de Morelos (CEPCM), Enrique Clement Gallardo, explicó que a pesar de los reiterados llamados a que cumplan, 20 de los 36 gobiernos municipales aún son omisos con este requerimiento legal.
El funcionario mencionó que estamos en plena temporada de lluvias y aunque las afectaciones hasta el momento no han sido muy graves, recordó que todavía faltan varios fenómenos hidrometeorológicos (huracanes y tormentas tropicales) pronosticados para el territorio nacional.
Apuntó que la coordinación no baja la guardia, pues es común que los incidentes, incluso los desastres relacionados con la temporada, suelan suceder cuando los suelos ya están saturados de agua, luego de semanas de precipitación pluvial acumulada.
Clement Gallardo indicó que los atlas de riesgo que han sido presentados “son buenos”, pero la mayoría no han sido actualizados. “Los fenómenos no cambian, pero sí cambian otros aspectos, como el crecimiento urbano y, por lo tanto, la población que podría estar en zonas de riesgo”, abundó.
Dijo que la norma no fija una antigüedad máxima para ese documento, pero se recomienda la actualización cada cinco años.
Algunos de los estudios presentados por los municipios fueron elaborados desde el año 2010, otros en 2015, y los más recientes son del 2018; podrían estar vigentes en lo general, pero sin duda hay modificaciones que deben ser consideradas, dijo.
El titular de la CEPCM aseguró que el atlas de alcance estatal sí está actualizado, pero apuntó que contiene datos a grandes rasgos de la entidad y los municipales deben considerar calles, colonias, cerros y demás datos específicos donde hay algún riesgo.
“Lo que va a pesar es que si es un momento dado hay una contingencia o desastre, se les pedirá y no podrían acceder a recursos estatales y federales… es una responsabilidad muy alta, porque los atlas sirven para planear hacia dónde va el desarrollo urbano y determinar, por ejemplo, en qué zonas no se pueden permitir o autorizar asentamientos; podríamos generar condiciones de riesgo en caso de no haber realizado este análisis”, concluyó.