Organizaciones presionan para evitar “carpetazo” a la búsqueda de cuerpos
La Fiscalía General del Estado (FGE) anunció que mañana iniciará la segunda fase de la diligencia ministerial en el panteón Pedro Amaro, en el municipio de Jojutla, ante la presión de colectivos y familiares de desaparecidos para evitar “carpetazo” a la búsqueda de más cuerpos, que habrían sido inhumados de manera irregular en la fosa común por exfuncionarios de la extinta procuraduría estatal en marzo de2014.
A través de un comunicado, la FGE informó que representantes de la Brigada Nacional de Búsqueda, la fiscalía y los colectivos sostuvieron una reunión para conocer el plan de trabajo para la segunda fase.
“Como fue acordado por los participantes, se presentó el proyecto de excavación correspondiente para iniciar la segunda fase de intervención a partir del lunes 7 de noviembre en el panteón municipal, en donde se desarrollarán labores para lograr una mayor profundidad de excavación en caso que el terreno lo permita al haberse pausado las labores al encontrar suelo virgen en el lugar.
“El proyecto, como fue acordado, busca ampliar la zona de intervención en forma de “L” para continuar con la búsqueda, misma que está a cargo del Misterio Público y peritos en distintas áreas por parte de la Fiscalía de Morelos, Fiscalía General de la República, Guardia Nacional y la incorporación de un arqueólogo de la Comisión Nacional de Búsqueda”, detalló.
El pasado 27 de octubre, en medio de dudas e inconformidades de colectivos y familiares de desaparecidos, la fiscalía estatal concluyó la diligencia ministerial en las fosas del panteón Pedro Amaro del municipio de Jojutla, donde se localizaron seis esqueletos completos y algunos restos óseos.
Ese mismo día, la activista, Amalia Hernández acudió al Congreso y denunció la intención de la FGE de dar “carpetazo” al caso de las fosas de Jojutla, donde los colectivos y familiares de desaparecidos sospechan que habría más cuerpos de personas no identificadas que fueron inhumados de manera irregular hace ocho años por la extinta procuraduría.
En mayo de 2016 se abrieron las fosas de Tetelcingo, en el municipio de Cuautla, donde se recuperaron 117 cuerpos que habían sido inhumados literalmente como “basura”, muchos sin número de averiguación previa o carpeta de investigación, sin descripción de causa de muerte, sin datos de filiación u otros datos que hicieran posible su posterior identificación y que permitieran a familias saber si sus familiares estaban entre los cuerpos no identificados.
En marzo de 2017 se repitió el proceso y detectaron las mismas irregularidades en la apertura de las fosas comunes de Jojutla, donde fueron exhumados 84 cuerpos y fragmentos cadavéricos. La diligencia en estas fosas fue suspendida en junio de ese año debido a que se toparon con tumbas no relacionadas con el caso y se tuvo que realizar un proceso judicial para continuar.
Luego ocurrió el sismo de septiembre de 2017 que devastó Jojutla y sobrevino la pandemia del covid-19, lo que postergó la reapertura de las fosas. El pasado 17 de octubre reiniciaron los trabajos y, diez días después, la FGE pretendió cerrar el caso, pero ante la presión social finalmente la fiscalía cedió y anunció el reinicio de la diligencia ministerial para indagar si hay más cadáveres inhumados irregularmente en las fosas.