La fecha con mayor peso en el calendario político es el primero de septiembre, durante siete décadas, ese día se rindió “culto a la personalidad presidencial”, la ceremonia de la entrega del documento con el cual en titular del Poder Ejecutivo informa a la nación el estado que guarda el país, justificaba diversos excesos que se cometieron para dar relevancia a los logros que desde el gobierno pretendían que se registrara en el ánimo social.
Las organizaciones políticas que surgieron en el Siglo XX, con ideologías diferentes a las del entonces partido en el poder, señalaban que eran ofensivas y excesivas algunas expresiones en relación a aquella ceremonia, a la que consideraban como “El día nacional del Presidente”, porque se paralizaban todas las actividades para permitir que a través de la radio y la televisión en tiempo real, todos los mexicanos se enteraran de las actividades presidenciales.
Entre los acontecimientos “memorables” en relación al informe presidencial destacan el que rindió Luis Echeverría Álvarez y que requirió de más de seis horas de lectura por parte del mandatario, que se transmitieron íntegras a través de las estaciones de radio y televisión existentes en aquel gobierno. Y el último de José López Portillo, cuando “lloró” desde aquella tribuna pidiendo perdón a los desposeídos, para exclamar: “Ya nos saquearon, pero no nos volverán a saquear” y en seguida anunciar que por necesidades nacionales, el gobierno asumía el control de instituciones bancarias.
“Las celebraciones y muestras de apoyo” por parte de sindicatos y organizaciones campesinas se dieron durante los siguientes días, previos a la entrega de su gobierno al presidente electo Miguel de la Madrid, el primero de septiembre de 1988, luego de la elección en la que “se calló y cayó el sistema electoral”. Durante el sexto informe de Miguel de la Madrid Hurtado, se dio la primer interpelación parlamentaria, cuando Porfirio Muñoz Ledo, senador por el Distrito Federal e impulsado por el Frente Democrático Nacional, intervino durante la lectura del informe presidencial.
En esa fecha, según analistas políticos de la época, “se rompió la augusta majestad” que en torno a la figura presidencial se había mantenido durante gran parte del Siglo XX, una década después el Congreso ya no era de mayoría priista y las interpelaciones e interrupciones, como la máscara que en un evento de estos sacó Vicente Fox cuando era diputado federal por Guanajuato por el PAN, se habían ya convertido en un elemento más de aquella ceremonia, hasta que dejó de ser “El día del Presidente”.
En Morelos, durante el gobierno de Carlos Salinas de Gortari el gobernador Antonio Rivapalacio acudía al evento en el Palacio Legislativo, en alguna ocasión, en un salón del Palacio de Gobierno, se reunió a los secretarios de despacho, encabezados por el secretario de Gobierno Alfredo de la Torre, para que a través de la televisión siguieran la ceremonia acompañados de algunos representantes de los medios de comunicación.
Al final de aquella transmisión que realizaba la Dirección General de Radio y Televisión, a través de enlaces en cadena nacional, en los que se incluía a todos los medios electrónicos, los reporteros entrevistaban a los funcionarios locales sobre su opinión en torno al mensaje presidencial. Sus respuestas eran señalando que “se trató de un documento histórico que describe la dimensión de estadista del señor presidente que ha cumplido”. Esas declaraciones y extractos del mensaje presidencial se imprimían en todos los periódicos al día siguiente.
En Morelos, los informes del gobernador que eran la “versión local” del informe presidencial, se conservaron con el “esquema tradicional” hasta el cierre del gobierno de Antonio Rivapalacio, existieron expresiones de inconformidad que eran “controladas” desde el gabinete político local, acudían representantes presidenciales, funcionarios federales y figuras sociales. Fueron eventos que advertían el control político que mantenía aquella administración, los señalamientos de los partidos políticos de “oposición”, se dirigían a las instancias federales.
Durante el gobierno de Jorge Carrillo Olea los informes se complicaron, cuando fracasó el proyecto de inversión turística para el municipio de Tepoztlán, las expresiones de rechazo de los lugareños advertían del distanciamiento que ya existía entre el mandatario y algunos sectores de la sociedad. En aquella época surgieron los “contra informes”, que a pocos metros del Palacio Legislativo presentaban militantes de los partidos de oposición, entre ellos el ex líder estatal del PRD Juan Ignacio Suárez Huape.
Se han diseñado diversos formatos para realizar esa ceremonia, que dejó de ser “El día del Gobernador”, ninguna ha dejado satisfecha a ninguna de las partes. El Poder Ejecutivo se advierte desplazado, el Legislativo menospreciado y la sociedad incrédula y desencantada, en algún momento se motivó la realización de “comparecencias” de los secretarios de despacho para que difundieran desde ahí los “logros” de sus dependencias. Hoy subsisten esas convocatorias, que se destinan a reclamar desde la oposición el incumplimiento de compromisos en las áreas que son citadas, se privilegia el reclamo a las áreas de seguridad y procuración de justicia.
DÍA DE AJUSTAR CUENTAS
Hasta el informe presidencial de 1982, cuando el documento con el texto del mensaje político que incluía la declaración de la nacionalización bancaria, se entregó a los reporteros cuando éstos ya se encontraban en el interior del recinto de San Lázaro el informe presidencial, incluidos los “anexos”, se distribuía a los medios de comunicación, en la madrugada del 1 de septiembre, esto permitía que en los periódicos se prepararan “ediciones especiales” con síntesis del discurso presidencial y datos resaltando avances en las diversas áreas de la administración pública, que se distribuían durante la ceremonia de “besa-manos” (salutación) que se realizaba en el Palacio Nacional.
En Morelos el informe se leía en el Congreso, y en Palacio Nacional funcionarios, invitados especiales y pueblo desfilaban para felicitar al mandatario en turno por el “cumplimiento de un año más de logros”, el análisis en torno a los datos consumía parte del mes de septiembre y pretendía mantener en alto el ánimo social. La transición se ha limitado a la entrega administrativa del Poder Ejecutivo, la intención entre partidos de “ajustar cuentas” en esa fecha se ha institucionalizado.
“No existen resultados que analizar”, aseguran quienes dan seguimiento público al desempeño gubernamental, las expresiones mediáticas en los últimos años, se han limitado a la revisión superficial, de los acontecimientos más sensacionalistas que se suceden en las fechas previas a ese día, para 2011 la mayor expresión es la “búsqueda de culpables oficiales y no oficiales” de los acontecimientos de Monterrey, al interior de la empresa Casino Royale.
El domingo 28 de agosto, el gobierno federal publicó un desplegado en los periódicos de circulación nacional, donde ofrece una recompensa de 30 millones de pesos, a quienes proporcionen datos para capturar a los responsables que “planearon y ejecutaron ataque al establecimiento Casino Royale en Monterrey, Nuevo León, y de los delitos que resulten”.
En esa fecha el PRD a través de un desplegado, anuncia que “El grupo parlamentario del Partido de la Revolución Democrática en la Cámara de Diputados trabajará una agenda divida en seis grandes temas para México”, bajo el título “Combatamos la inseguridad con educación y rescatemos a los jóvenes” proponen revisar la seguridad nacional y ciudadana, el presupuesto 2012 para la protección y reactivación del empleo, el Estado responsable de bienestar económico y social, el combate a la corrupción, medio ambiente, cambio climático y gestión integral del agua, reforma política y participativa.
EL QUINTO INFORME
El evento que mayor análisis periodístico tuvo durante las siete décadas en que gobernó el Partido Revolucionario Institucional, fue el quinto informe de gobierno, en el mensaje político, en los temas que mayor interés y reconocimiento tenían en el discurso político que desde la tribuna legislativa leía el Presidente, se intentaba “descubrir” la señal sobre quien sería desde el gabinete el “ungido” que se convertiría en el “supremo poder” para los siguientes seis años.
Consideraron dentro del “ceremonial priista” que en ese momento el Presidente en turno se encontraba en la cumbre de su administración y desde ahí observaba a los “precandidatos”, y empezaba a “dibujar” cual sería el perfil del siguiente mandatario, al que le entregaría el poder. Existen reflexiones que establecen que Luis Echeverría provocó el sentimiento de que México entraba a una crisis política luego de un periodo prolongado de desarrollo económico ordenado, para con esa visión de ser él, el “ungido” que sustituiría a Gustavo Díaz Ordaz. Echeverría fue el primero en ser nominado sin experiencia electoral previa, todos los presidentes civiles anteriores tenían procesos electorales propios en su currículum.
Esa “tradición” se mantuvo con José López Portillo, Miguel de la Madrid, Carlos Salinas de Gortari y Ernesto Zedillo, Luis Donaldo Colosio sí tenía experiencia electoral propia. Al igual que Francisco Labastida Ochoa, quien fue gobernador electo por Sinaloa y candidato presidencia del 2000 y Roberto Madrazo, candidato del 2006, fue gobernador de Tabasco. Algunos priistas consideran que el PRI inició su debacle cuando empezaron a nominar candidatos presidenciales con trayectoria burocrática y sin experiencia partidista.
En Morelos, Jorge Carrillo Olea fue candidato a gobernador sin experiencia partidista o electoral propia, sus detractores aseguraban que “nunca había cuidado ni la casilla de su barrio”, con ello advertían que no entendía la importancia de gobernar con el partido que lo llevó al Poder Ejecutivo estatal, concluyó su compleja gestión administrativa de cuatro años distanciado de su partido, incluso algunos priistas le iniciaron un proceso de expulsión, exigiendo que se aclarara el deterioro electoral de 97 cuando su partido perdió la capital del estado y el control del Congreso, así como tres de las cuatro diputaciones federales que se disputaron.
Ese proceso se interrumpió, cuando los priistas consideraron que “el escándalo” en torno a su proceso de expulsión, luego de que fue el primer gobernador al que le quisieron realizar desde el Congreso un juicio político, podía afectar las “expectativas electorales” rumbo a la compleja elección del 2000. Lauro Ortega Martínez sí tenía trabajo partidista y experiencia electoral acreditada, LOM fue presidente del CEN del PRI y sus gestiones de total vinculación con su partido eran comparadas con el distanciamiento social que caracterizó la gestión del militar.
En el quinto informe de gobierno de Carlos Salinas de Gortari se ponderó el éxito del Programa Nacional de Solidaridad, esquema mediante el cual, según Jorge Meade Ocaranza, líder priista en Morelos de aquella época, además de impulsar las políticas públicas de combate a la pobreza se desarrolló una estructura electoral paralela a la del PRI.
Al frente de la Secretaría de Desarrollo Social, donde se ubicaron los programas del Pronasol, se nombró al ex presidente del Comité Nacional del PRI, Luis Donaldo Colosio, desde ahí se le ha designado como abanderado del PRI a la presidencia de la república, y Ernesto Zedillo fue designado coordinador general de la campaña. Manuel Camacho era regente de la ciudad y fue considerado como uno de los “precandidatos con más posibilidades”. Desde ahí inició una serie de acciones que muchos consideraron como “actos de indisciplina”.
El primero de enero de 1994 entró en vigor el Tratado de Libre Comercio entre Canadá, Estados Unidos y México, ese día se realizaron en una zona del estado de Chiapas movilizaciones de un grupo de inconformes, entre las que destacó la retención forzada en la zona del general Abasalón Castellanos Domínguez, ex gobernador de aquella entidad.
Manuel Camacho provocó que lo nombraran representante del gobierno federal para el diálogo con el Ejército Zapatista de Liberación Nacional, lo que provocó que en ocasiones lograra más reflectores que el candidato presidencial priista, lo que era considerado delicado, luego de que en la elección de 1988 el PRI tuvo que “negociar” con el Frente Democrático Nacional la legitimación del triunfo de Carlos Salinas de Gortari, en una “operación” que provocó para Morelos la entrega de dos de los cuatro distritos federales electorales al FDN, pues aquí el frente logró más votación que el PRI.
Durante el aniversario del PRI el candidato Colosio leyó un discurso que fue considerado como “el golpe de timón” para relanzar la campaña presidencial, semanas después fue asesinado y las campañas se suspendieron por varios días, se designó como candidato presidencial a Ernesto Zedillo y a Manuel Camacho Solís los priistas “lo disciplinaron”, el ex regente participa en el proyecto de Andrés Manuel López Obrador, firme crítico del gobierno de Salinas de Gortari.
Como ejemplo, en el Quinto Informe Salinas era el presidente legítimo de los mexicanos, había logrado controlar los procesos devaluatorios de la moneda, se advertía estabilidad cambiaria, el Pronasol era reconocido por las economías desarrolladas como proyecto viable para combatir la pobreza, significó un incremento del 85% del presupuesto al gasto social, estaba firmado el acuerdo comercial más importante de México, por el que habían trabajado el presidente y su grupo de “hombres de confianza”. Se modificó la relación Iglesia-Estado, la ley agraria, Telmex se había desincorporado, al igual que Imevisión y los bancos. El sexto informe ya cuando el proceso electoral había concluido, se realizó con el peso del candidato asesinado y del Movimiento Zapatista.
“Nuestro país entrara en una reflexión para la realización de las elecciones federales, la participación de todos los ciudadanos consolida nuestras instituciones democráticas, ofrezco a las diversas fuerzas políticas y a los contendientes que participaran en esta justa electoral, pleno respeto, apego a lo que establece la ley, y condiciones adecuadas para que, con toda libertad, presenten sus opciones a los mexicanos”. Dijo el 1 de septiembre de 1993, Carlos Salinas de Gortari.
Durante la lectura de su quinto informe de gobierno: “Convocó a la federación, a los partidos políticos, a los grupos sociales, a todos los ciudadanos, a unirse en un esfuerzo comprometido para realizar elecciones claras, transparentes y ejemplares, para asumir un pacto político de civilidad, en el marco de la ley”.
En aquel documento la referencia al narcotráfico fue: “Creamos el Instituto Nacional para el Combate a las Drogas, organismo capaz de realizar con la tecnología y los métodos más modernos, esta vital tarea en favor de México. Reitero, esta es una lucha soberana sin descanso, pero el triunfo definitivo no lo encontraremos sólo dentro de nuestras fronteras, sino en adecuada cooperación internacional. Mientras el mercado de consumo proporcione utilidades y ganancias tan elevadas el combate a estas organizaciones seguirá imponiendo a nuestra sociedad costos altísimos. México promueve la discusión de este problema en foros mundiales para que, en la cooperación respetuosa, avancemos en esta guerra común”.
La revisión de aquel documento advierten a la distancia, que el gobierno federal sintió que dio los resultados necesarios para legitimar ante la sociedad, una determinación que en 1988 provocó una intensa movilización y un plantón alrededor del Ángel de la Independencia por parte de los seguidores de Manuel Clouthier, candidato panista, y de Cuauhtémoc Cárdenas, aspirante del Frente Democrático Nacional, y a quien muchos consideraron como el candidato que más votos logró acumular.
En diciembre de 1994, al inicio del gobierno de Ernesto Zedillo, México vivió una crisis financiera y económica, que eliminó del ánimo nacional el sentimiento de que el gobierno de Salinas había dejado una estructura económica sólida y blindada. “Salinas dejó la economía sostenida en alfileres, Zedillo quitó los alfileres”, dijo la sociedad.
EL RETO HOY
El atentado a un centro de apuestas en Monterrey, ligado a el incendio en la guardería de Sonora, los cadáveres colgados por las organizaciones criminales, el caso Sicilia y todos los acontecimientos sensacionalistas, son el tema central de los monólogos entre el Poder Ejecutivo y el Legislativo, limitando el espacio a las repercusiones que tendrán en el ánimo de los electores para el primer domingo de julio de 2012.
La compleja situación económica y el desencanto social no están incluidos en la cobertura mediática de hoy, esos temas forman parte de la agenda de “indispensables” que reclaman una revisión y adaptación desde el Poder Legislativo para su operación en el Ejecutivo, sin embargo la deteriorada relación entre ambos poderes “bloquea” cualquier entendimiento, más haya de los señalamientos y críticas.
NOTA SIN PENTAGRAMA
Manuel Leví Peza analista de temas políticos y económicos, al reflexionar los efectos que puede tener la evolución de la economía mundial en los próximos meses sobre el ánimo de los electores para el primer domingo de julio de 2012, señala que los votantes se sentirán como “una nota musical sin pentagrama”, ni los partidos políticos ni el gobierno tienen un proyecto serio para atender desde los social y lo económico los retos que el reordenamiento financiero presentarán para nosotros.
Advierte que en el corto plazo, Estados Unidos no puede elevar las tasas de interés ni los impuestos deberán suprimir el gasto corriente, lo que puede generar disminución en la demanda de productos y servicio de las empresas nacionales y connacionales radicadas en la vecina nación, incluidos los que se encuentran ahí sin reconocimiento legal, pero que aportan a aquella economía.
Además advierte, aquí se carece de un plan de contingencia para enfrentar el problema que se avecina por la deuda interna, no se toma en cuenta la condición que hoy guardan las deudas municipales que tendrán influencia en el ánimo electoral.
Hoy tenemos reservas probadas por cerca de 135 mil millones de dólares, que se considera suficientes, sin embargo no se toma en cuenta la carga de la deuda histórica soberana que es impagable, con la que se corre el riesgo de tener que convertirla en deuda privada. También debe considerarse que al contraerse el consumo como efecto de los ajustes, se reducirá la posibilidad de acceder desde aquí a los dólares que genera la migración tolerada, que será reprimida.
Otro conflicto pospuesto es el manejo adecuado del pago de pensiones y jubilaciones, así como el destino que tendrán los recursos que se generan por diversas actividades, entre las que destacan las de las industrias extractivas, el petróleo, recuerda que la desaceleración económica genera disminución del poder adquisitivo, desempleo y subempleo ilegal, lo que confirma que nuestra economía no está blindada.
Debemos entender, aseguró el ex funcionario del Banco Interamericano de Desarrollo, que los gobiernos no pueden permitirse la insolvencia, porque se rompería la “cadena de deudores”, lo que está colocando a muchos en condiciones de “esclavitud financiera” ante el Fondo Monetario Internacional, que impone la aplicación de una serie de criterios que afectan el gasto corriente y superfluo de los gobiernos y también impactan en las cantidades y periodicidad de los recursos que se destinan a políticas sociales.
Hoy existe un desorden en el manejo de la deuda soberana, por lo que es indispensable, aplicar una reforma integral al sistema fiscal, cobrar más impuestos a los beneficiarios de la crisis. Aquí hizo referencia al planteamiento que los grandes capitales de Francia hicieron a sus autoridades, cuando propusieron que se les incrementaran los impuestos, al tiempo que se eleva la transparencia en el manejo de todos los recursos públicos.
Sugiere también que se mantenga sin soportes artificiales la flotación de la moneda, que se evite hasta donde sea posible los incrementos a los impuestos que impactan directamente en el ánimo de la población. En los Congresos se aplican controles a los endeudamientos anuales, pero nunca se revisa el peso que ya tiene su endeudamiento histórico y soberano que se acumula en cada ciclo y que no tiene tope, lo que los convierte en impagables.
El manejo de la deuda, recordó, se establece desde la Banca de Asentamiento y Pagos, así como por el Fondo Monetario Internacional, que es el órgano regulador, por ello desde el congreso y en sintonía con el Poder Ejecutivo deben implementarse proyectos estratégicos que garanticen la protección de los recursos naturales y los desarrollos turísticos, atiendan la necesidad de crear nuevas tecnologías que permitan sustituir el agotamiento de recursos petroleros, reprimir el incremento de la piratería, entre otros aspectos de impacto económico.
La agenda en relación a los temas políticos también fue desplazada por los enfrentamientos partidistas en los foros públicos buscan culpables de la violencia, y por ello no se atienden asuntos como la falta de liderazgo legítimo, el que el Código Fiscal sea hoy una amenaza para los contribuyentes, por los excesos de burocratismo en contra de los nuevos proyectos productivos, el vicio desalentador de las auditorías fiscales, en el sector salud se tratan a las enfermedades y no se considera a los enfermos, lo que provoca servicios médicos deshumanizados, los servicios ferroviarios han estado abandonados en la última década, también los servicios portuarios y aeroportuarios, todo se ha canalizado a los servicios carreteros pero el traslado de productos en nuestro país es caro y de baja calidad.
El Poder Judicial está rebasado, concluye Leví Peza, al advertir que no existen ya figuras salvadoras y sí una ausencia de credibilidad, por lo que las campañas resultarán costosas y con poca participación ciudadana, se dará un incremento en el voto nulo, lo que genera espacios para el intervensionismo. El reto es provocar en la siguiente generación mayor educación, disciplina, el conocimiento de la tecnología y su aplicación.