“De esta manera nos acercaremos al poder de la tierra, más que al poder político”, ha dicho el candidato al visitar municipios de nuestro estado principalmente en la Zona Sur. Demédicis Hidalgo recalca la importancia de alcanzar un magnífico ejemplo de aplicación de la ciencia agrícola en las plantaciones, así como una mejor innovación tecnológica.
En este sentido propone que al tiempo de extender la calidad de la producción, se incorpore maquinaria moderna, fertilizantes apropiados, sistemas de irrigación adecuados y rotación de cultivos a efecto de resolver el grave problema del desempleo rural, la emigración del campo a la ciudad y el cambio climático.
A la distancia de un siglo, el Plan de Ayala tiene más vigencia que nunca, los resultados de la Reforma Agraria no son los que se esperaban de ella, se han eliminado tierras de cultivo para transformarlas en carreteras, aeropuertos, centros comerciales, fraccionamientos residenciales, asentamientos humanos irregulares, tiraderos de basura a cielo abierto, talas irracionales de árboles y muchas obras públicas y privadas que erosionan y degradan el suelo y que provocan incendios forestales, sequías, inundaciones, salinización de kilómetros cuadrados de terreno, reducción de recursos acuíferos y un dramático déficit de producción alimentaria que trae aparejado la malnutrición infantil, la hambruna, las enfermedades, el bajo nivel de escolaridad y mayor dependencia extranjera.
Demédicis Hidalgo en su propuesta al Senado de la República recalca que al ser Morelos cuna de la Reforma Agraria, é no perderá de vista que el Plan de Ayala no fue sólo una promulgación libertaria contra los nuevos opresores del pueblo, sino que es en estos momentos un gran ajuste estructural biotecnológico destinado a mejorar y a transformar la agricultura y a introducir una nueva era histórica para Morelos, junto con un gran cambio en el modo en que viven las poblaciones campesinas.
En esta nueva visión el contenido del Plan de Ayala, tendrá que crear muchos nuevos empleos y eliminará aquellos otros tradicionales que generan raquíticos ingresos familiares; ofrecerá nuevos productos y mejores formas de crear los existentes; abrirá nuevos mercados y reducirá los costos de muchos servicios y bienes manufacturados y, con toda seguridad contribuirá a distribuir con equidad la riqueza de Morelos entre sus pobladores.