Los funcionarios municipales informaron que tras la salida del alcalde Pablo Galván Hernández, quien pidió licencia definitiva desde hace cuatro meses para contender por una diputación local, el gobierno municipal dejó de operar correctamente.

Y a su vez, el presidente municipal suplente Enrique Tenco Rosas pidió licencia definitiva al cargo, lo que obligó a que el síndico municipal Eloy Adaya Liévalos tomara el cargo.

“Lo que exigimos es que el gobierno del estado cumpla con sus obligaciones y envíe la terna para elegir al nuevo presidente municipal, pero también para que intervenga en los conflictos que se han registrado en el municipio. Es desesperante porque es el poblado el que está sufriendo esta ingobernabilidad”, declaró Octavio Galván Vargas, regidor de Totolapan.

Los regidores acudieron ayer al Congreso del estado para pedir la intervención de los diputados, pues afirmaron que la situación social en Totolapan se ha salido de control.

“El pueblo está sin agua, los pozos funcionan con luz y la luz fue cortada, las comunidades más alejadas se abastecen con pipas. Asimismo, la seguridad pública está ausente porque los policías están haciendo la guardia personal al presidente propietario, que está incurriendo en excesos, se emborrachan y además porque se aferra al puesto”, declaró el regidor Galván Vargas.

Ante esta solicitud, los integrantes de la diputación permanente emitieron un exhorto al Ejecutivo del estado para que intervenga en la problemática de Totolapan y de inmediato envíe al Congreso del estado una terna para elegir al presidente municipal.

Cabe recordar que el problema social en este municipio se desató el pasado 9 de julio, cuando Pablo Galván Hernández intentó regresar al cargo, los pobladores se opusieron y se designó al síndico municipal en su lugar, en tanto el Congreso local nombraba a un alcalde.