El primer problema que, dijo, atacará es el “pirajate”, por ser la principal queja de concesionarios y una situación que no se ha podido atender por las autoridades. Además, de los “vicios” que pudieran detectarse en la misma dirección y de ser necesario hará cambios al interior.
“En cualquier cambio es sano hacer una limpia, más cambios, pero revisaremos donde sea conveniente y donde se cumpla con el trabajo no habrá porqué sacar a nadie”.
El ex diputado local reconoció que no será tarea fácil, pues los problemas que existen en el transporte fueron acarreados desde hace varios años, como el rezago en el servicio que se da a la ciudadanía, en la calidad de unidades y capacitación de operadores.
En este sentido, insistió en que seis meses es un plazo conveniente para entregar resultados a las distintas organizaciones de transportistas, con las cuales dijo tener buena relación desde que fue presidente de la Comisión de Tránsito y Transportes en el Congreso local. “Puedo decir que abrumadoramente por mayoría tengo excelente relación”.
Como cualquier funcionario que inicia su trabajo en alguna dependencia estatal, aseguró que su proyecto principal es mejorar el servicio y resolver las demandas de concesionarios en el menor tiempo posible.
David Gómez, sorprendido por su destitución
David Gómez Basilio, quien hasta este lunes fuera director de Transportes, se dijo sorprendido por el cambio, pues la noticia la recibió en el mismo día que tuvo que dejar la dependencia. Sin embargo, se dijo satisfecho por el trabajo que realizó durante los más de tres años en el gobierno estatal.
“Entiendo que fue una reestructuración y no veo nada más allá. Los cambios son sanos y hubo logros importantes, por lo que me voy con la frente muy alta”, declaró minutos después de que el secretario de gobierno Jorge Morales Barud tomara protesta a su sustituto.
Aseguró, que a diferencia del ex director de Protección Civil Daniel Hernández, él no tiene ningún problema administrativo ni investigaciones a las cuales responder. “Acotamos los procedimientos durante la gestión, siempre procurando la rectitud y los valores”.
Con respecto al plazo de seis meses que se puso Francisco Alva Meraz para “limpiar” la Dirección de Transportes, respondió: “Esperamos que sí, estuve tres años, tres meses y nueve días, y no se pudo. Ojalá que sea así”.