Apenas el jueves pasado en la sesión ordinaria los priistas hicieron uso de la tribuna para quejarse de que en el tiempo de la gestión de Guillermo del Valle Reyes se llevaron a cabo remodelaciones a dos edificios que son rentados para oficinas por los congresistas, donde se gastaron tres millones de pesos.
Pese a todos estos detalles que fueron dados a conocer desde la tribuna, los diputados votaron en contra del punto de acuerdo propuesto por el ex presidente de la Junta Política y de Gobierno, Jorge Arizmendi García, para auditar de manera externa las arcas del Congreso del Estado.
Mientras que los diputados peleaban en la tribuna por el gasto ejercido, en el segundo piso del Congreso del Estado se lleva a cabo otra remodelación, que no era necesaria, pues las oficinas reciben mantenimiento cada año, y unos meses antes de que iniciara sus funciones esta Legislatura fueron cambiadas las alfombras y pisos.
La remodelación que ahora se lleva a cabo incluye el cambio de alfombras por duela metálica imitación madera, cambio de cortinas y la compra de un refribar para cada uno de los legisladores.
El personal del Congreso local se negó a informar el costo que tendrá esta remodelación, razón por la cual el dato fue solicitado a la Unidad de Información Pública del Congreso local.