Dijo que “hay una actitud poco comprensible en la alcaldesa, porque no estamos hablando de una cantidad significativa como para que arriesgara su cargo y el del cuerpo edilicio, además, la mayoría de los regidores y el síndico ya habían acordado cubrir el adeudo, pero se siguió negando”.
Luego agregó que la denuncia viene desde el 2009, sin embargo, fue ya a mediados de mayo cuando las cosas se comenzaron a complicar, porque el cuarto tribunal colegiado y el juzgado cuarto de distrito ordenaron el pago inmediato o la destitución. Ante dicha posición, el Tribunal Estatal de Conciliación y Arbitraje (TECA) turnó el asunto al Congreso local, pero éste se declaró incompetente para actuar y le regresó el expediente a fin de que fuera esta instancia la que procediera.
Refiere que en medio de las presiones, el titular del tribunal citó a Figueroa Peralta para que le explicara el porqué de tales actitudes, “lo que el funcionario dice es que ella le manifestó que sus asesores le decían que no había problema, porque venían depositando mensualmente cuatro o cinco mil pesos, pero éste le indicó que en materia laboral esto sólo es posible si las partes llegan a un arreglo, sólo que aquí no hay”.
Juan Bravo agregó que “tuvimos que volver a recurrir vía amparo a los tribunales federales y el TECA debió cumplir con su responsabilidad, el 26 de noviembre, previa una sesión de pleno, notifica a Peralta de su destitución, sólo que ella no la ha acatado”.
En esa sesión, dice el texto, “por unanimidad de votos el pleno del TECA declara procedente la destitución del presidente municipal del H. Ayuntamiento de Jojutla, Morelos y se otorga para tal efecto, un término de 15 días”. Para el asesor legal, desde su notificación, la aludida debió dejar la responsabilidad, de otra manera todo lo que haga no tendrá sustento legal.