Con la modificación temporal del programa Hoy No Circula, el sistema de abasto de la Ciudad de México corre el riesgo de colapsar, al restringir la circulación del autotransporte público de carga, dijo.
Agregó que esta medida se aplica a partir del día 5 de abril y hasta el 30 de junio, igual que para todos los vehículos, pero a diferencia de otros años, las autoridades incluyeron en esta ocasión al servicio del autotransporte público federal en el programa Hoy No Circula, lo que implica que el 20% de las unidades no estaría entrando -en una primera etapa- a la Ciudad de México.
Sin embargo, hoy se tiene un tema de contingencia ambiental, por lo que son cuatro números de placa de unidades que no están con posibilidad de acceso a la Ciudad de México y zona conurbada, lo cual representa un 40% del transporte destinado a dicho destino, según refirió Hernández Delgado.
Señaló que las principales consecuencias económicas son el desabasto de productos a zonas conurbadas, así como atrasos en los procesos de comercialización.
Recordó que muchos de los camiones vienen de la parte norte y centro del país, así que tendrá que considerarse la situación económica de las empresas a nivel nacional, teniendo en cuenta que la Canacar a nivel nacional exhortó a las autoridades a exentar al transporte público federal del Hoy No Circula.
“Se detiene prácticamente todo el autotransporte de carga de los diferentes sectores, de la industria de plástico, manufactura, de todo tiempo. Debo decirlo que esto no se aplica para transporte de materiales y residuos peligrosos pues esto está en la ley”.
Destacó que el hecho de tener a los vehículos de carga varados tiene implicaciones en el tema de seguridad y en cuanto al desabasto a diferentes sectores, por lo que todos los que forman parte de la cadena de suministro quedan afectados económicamente.