“No queda para nada, apenas y nos alcanza para la cuenta, porque las placas no son mías, y 100 pesos para llevar a mi familia”, dijo uno de los más de 11 mil taxistas que operan en la zona conurbada de Morelos.
El trabajador del volante –quien prefirió guardar el anonimato, pero que integra la línea taxis “Cuernavaca”– explicó que luego de los varios incrementos que se han dado en el combustible, debe gastar en gasolina de 150 a 200 pesos, hasta 50 pesos más que el año pasado, y está imposibilitado de obtener más pasaje, debido a los miles de autos de alquiler que circulan todos los días desde que en el sexenio anterior se permitió la llamada “metropolización”, por la que taxistas de otros municipios pueden trabajar sin sanciones en Cuernavaca.
Por esta razón, agrupaciones de transportistas se sumarán para insistir en subsidios ante el gobierno estatal y ahorrar por lo menos en el pago del tarjetón, tenencia, cambio de propietario, licencias y demás impuestos que se deben pagar en la Dirección de Control Vehicular.
Román Rojas Almaraz, presidente de la Federación Auténtica de Morelenses en el Autotransporte (FAMA), dijo que esta semana prepararán oficios que se harán llegar a la Secretaría de Gobierno a fin de que sean leídas sus exigencias.
A diferencia de otros transportistas, Rojas Almaraz dijo que dejarán como último recurso las manifestaciones y tomas de calles. “Confiamos en que este año también nos condonen los pagos en Control Vehicular, al igual que en años anteriores, porque las afectaciones apenas empiezan: del incremento a la gasolina se derivarán muchos otros más.”
Del servicio del transporte público sin itinerario fijo se sostienen cerca de 15 mil familias, tan sólo en los municipios de la zona metropolitana del estado. Por ello esta situación, además de pedir apoyo económico al gobierno estatal, también se contempla un incremento a la tarifa mínima del pasaje en taxi.