El escenario se presentará a nivel nacional, señala especialista; la población debe cooperar para que el mosco transmisor no se reproduzca.

El panorama epidemiológico para este año indica que se espera un repunte importante en la incidencia de dengue; de hecho, en Morelos ya se registraron oficialmente 30 casos, en tanto que, para el mismo periodo en el 2019 solo había siete diagnósticos confirmados.

Además, en la entidad circula el serotipo del virus conocido como “DEN-2” o tipo dos, que se considera más agresivo y que históricamente ha causado el mayor número de muertes por dengue en la entidad. Las autoridades de salud señalaron que no hay motivo de alarma, pero es importante que la población participe en las acciones de prevención, con limpieza en sus viviendas.

Yoselin Jaime Rodríguez, responsable estatal de vigilancia hospitalaria de dengue de los Servicios de Salud de Morelos (SSM) explicó que hasta ahora se confirmaron 30 casos de dengue en la entidad, de los cuales 25 son con signos de alarma y cinco no graves.

“Es importante que demos a conocer que hay un poco más de casos porque la población tiene que hacer conciencia y ayudarnos a nosotros los Servicios de Salud para que los casos no se vean incrementados”, explicó al recordar las recomendaciones de prevención.

Apuntó que es fundamental erradicar las condiciones que favorecen la reproducción del mosco transmisor, el cual deposita sus huevecillos en cualquier recipiente de agua limpia. Incluso es capaz de colocar los huevecillos en los huecos de árboles, en agua acumulada en corcholatas, llantas, botes, piletas de agua limpia, tinacos sin tapa, incluso en vasos olvidados o arrojados a la intemperie.

El mosco transmisor necesita para alimentarse la sangre de los humanos, por lo que suele estar dentro o muy cerca de las viviendas, ya que detecta a las personas por el calor. Un mosco infectado con virus contagia a las personas a las que pica y puede transmitir la enfermedad a sus huevecillos; cabe señalar que una hembra puede llegar a depositar hasta 120 huevos.

Por eso es fundamental atacar las formas de reproducción, y esto solo se logra si en las casas y demás sitios públicos se sigue la estrategia de “tira, lava, tapa y voltea”, que las autoridades sanitarias han lanzado.

El propósito es que la gente elimine de sus casas cualquier recipiente con agua, porque se llegan a reproducir los moscos hasta en floreros, platos que se colocan bajo macetas, plantas acuáticas que se colocan dentro de las casas, entre otros lugares.

Especialistas del programa de enfermedades transmitidas por vector, como el dengue, zika y Chikungunya, recordaron que este padecimiento se transmite por el mismo tipo de mosco. Incluso los huevecillos del insecto pueden sobrevivir durante un año en un sitio seco, y al volver a estar en contacto con el agua eclosionan, es decir, continúan con su ciclo de reproducción, de ahí la importancia de lavar bien todos los tinacos y piletas, donde se almacena el agua y sus paredes.

Uno de los indicadores es observar los llamados “maromeros” que son las larvas.

Jaime Rodríguez indicó que el panorama epidemiológico es igual en todo el país, donde se espera que haya un incremento porque el comportamiento es cíclico, cada dos o tres años, se observa un año con más casos, al que se le conoce como “año epidémico”, de tal manera que no es algo nuevo, se observa desde que llegó el dengue a México, pero es importante que la población colabore con la prevención.

Destacó que es fundamental que la gente acuda al médico en cuanto presente los síntomas, que en el caso de dengue son: fiebre, dolor de cabeza, de cuerpo, de huesos y cuando se complica hay “signos de alarma”, que son sangrado por las encías y por la nariz y dolor abdominal intenso y continuo.

El mayor número de casos han sido por serotipo 2, el que históricamente ha provocado más muertes. En Morelos circulan los tipos uno y dos, y éste último es el más agresivo; por ello, insistió, es necesaria la prevención.