No será deuda pública, sino de un apalancamiento del presupuesto de la capital, pagadero a 12 meses.
Gracias a la alta calificación crediticia de la administración municipal se cuenta con 93 millones de pesos para atender el impacto económico de la comuna ante la baja recaudación derivada de la pandemia: Antonio Villalobos.
La línea de crédito se irá utilizando a medida que se requiera, orientada a cumplir compromisos ante CFE, Conagua y para gasto corriente, que contempla sueldos y salarios.
El presidente municipal de Cuernavaca, Antonio Villalobos Adán dio a conocer que dentro de la Sesión Extraordinaria de Cabildo de este viernes 29 de mayo, se aprobó la contratación de una línea de crédito, que se irá utilizando a medida que se requiera, y que estará orientada a cumplir los compromisos de pago ante instancias como la Comisión Federal de Electricidad (CFE), la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) y para gasto corriente, que contempla sueldos y salarios, para los que, reconoció el alcalde, no se cuentan recursos para cumplir este quincena.
Dentro de la orden del día del máximo órgano de gobierno del municipio, el cuerpo edilicio autorizó al Ayuntamiento de Cuernavaca, la contratación de un crédito a corto plazo con una vigencia no mayor a 12 meses, para cubrir las necesidades originadas por insuficiencias de liquidez de carácter temporal, llevando a cabo la implementación de un proceso competitivo para su contratación.
Al respecto, Villalobos Adán señaló que, gracias a la alta calificación crediticia de la administración municipal y los buenos manejos de la hacienda pública, se cuenta con 93 millones de pesos para atender el impacto económico de la comuna ante la baja recaudación derivada de la pandemia, situación que es compartida lo mismo por un gran número de familias que por empresas, comercios e industrias a nivel local y global.
“Las finanzas del ayuntamiento están en números rojos, colapsadas; no hay para pagar nómina ni de sindicalizados ni personal de confianza. No se trata de deuda pública, sino de un apalancamiento del presupuesto de la capital, pagadero a 12 meses; pero este crédito puente no necesariamente será utilizado en su totalidad”, precisó.
“Es como cuando una persona recibe una tarjeta de crédito y con ella decide qué pagar: colegiaturas escolares, el super mercado, la letra del auto o una emergencia médica, y posteriormente, cuando ya hay flujo de efectivo, liquida el saldo o total, cuando se regularicen sus ingresos. No se utilizará ni para compras ni obras; es para gasto corriente y en lo que se reactiva la economía, y que no se interrumpan los servicios que prestamos.
Esta medida contempla también el adelgazamiento de la planta laboral (capítulo mil) que dependerá también de cómo es sorteada esta crisis”, concluyó el presidente municipal.