Antes de la contingencia sanitaria por el covid-19 los ingresos económicos de Eustolio Soto Mazón superaban los 500 pesos diarios. Hoy dice que con mucho esfuerzo logra reunir 150 pesos para mantener a su familia.
Eustolio trabaja desde hace 19 años como chofer de taxi y afirma que ni el temblor de 2017 afectó tanto a su economía como el covid, que le ha obligado a trabajar desde las seis de la mañana hasta las nueve de la noche para poder solventar los gastos de la casa, como el pago de los servicios de energía eléctrica y de agua potable.
“El dinero apenas alcanza para sobrevivir, ya ni siquiera para darse lujos o comprarse algo de ropa. Cuando llegaron las empresas de transporte privado de Uber y Didi también vimos que el servicio de taxi empezó a disminuir, pero no tanto como ahorita que pasamos horas esperando clientes”.
El entrevistado refiere que por la pandemia apenas logra realizar entre siete y diez servicios diarios de trayectos cortos, por los que cobra alrededor de 35 pesos. Antes de la emergencia sanitaria hacía hasta 20 viajes durante el día.
Sobre su trabajo, cuenta que para evitar un posible contagio del covid-19 todos los días usa cubrebocas y gel antibacterial y lo mismo pide a sus clientes, porque en esta contingencia -dice- debemos cuidarnos entre todos.
“Yo uso el tapabocas porque no quiero contagiarme ni contagiar a los demás y sé que en mi casa mi familia me espera”.