Hablar de la prevención del suicidio es relevante para crear una verdadera consciencia de que el fenómeno es importante, pero hay que matizar lo sociocultural e histórico, dijo Enrique Álvarez Alcántara, psicólogo jubilado de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) en el marco del día mundial de la prevención del suicidio. 

“Un suicidio que tiene otra característica es el de emulación política, lo que se observa en los actos terrorista. Se suicidan, pero con cierta connotación, por lo que hay que diferenciar los suicidios por trastorno mental de las convicciones sociales o culturales en general”. 

Explicó que el suicidio tiene diversas formas. En mujeres es distinto que en hombres en el procedimiento. La ideación suicida es más general que la realización. “Un día como estos hay que tenerlo presente para tomar conciencia del fenómeno, porque muchos sobreviven con secuelas, consecuencias físicas, económicas, mentales o jurídicas y las consecuencias psicológicas para el entorno de la familia”. 

En sus redes sociales, la Facultad de Psicología de la UAEM señaló que es importante romper con mitos y prejuicios sobre el suicidio y señala cinco mitos respecto de esta acción. 

Un mito es que la persona que habla sobre suicidarse, solo quiere llamar la atención cuando la realidad es que la mayoría de los que han intentado el suicidio han manifestado sus intenciones.

Otra situación considerada mito es que se piensa en el suicidio por que sé es cobarde para afrontar los problemas, cuando en realidad no se trata de valentía o cobardía, se trata de dolor, desesperanza y sufrimiento. 

Otro de los mitos a los que se hace referencia en la publicación es que los niños no se suicidan pero se explica que el año pasado mil 150 niños se suicidaron en México. 

Datos oficiales revelan que México tiene una tasa de 5.1 suicidios por cada 100 mil habitantes (8.5 para hombres y 2.0 para mujeres), y las cifras han crecido en forma alarmante en los últimos años. 

Otro mito es que “sólo se tiene que echarle ganas, sobreponerse y salir adelante”, sin embargo, el sufrimiento que se vive no es voluntario, requiere de apoyo y atención profesional, se indica en la publicación en redes sociales de la Facultad de Psicología.

Finalmente se menciona como un mito más el que “no hay nada que se pueda hacer cuando (se) ha tomado la decisión de terminar con su vida”, pero la realidad es que gran parte de las personas que contemplan el suicidio lo comunican con la intención de recibir ayuda. 

Por su parte, Enrique Álvarez recomendó estar alertas y si reconocen ideas suicidas en sí mismo o en los otros acudan a solicitar ayuda profesional, porque eso va a permitir enfrentar con mayores recursos la situación en que se encuentran. 

El Día Mundial de la Prevención del Suicidio (DMPS), se estableció el 10 de septiembre y se organiza por la Asociación Internacional para la Prevención del Suicidio (IASP).