El año pasado, ni siquiera en temporada de calor vendía bien las chamoyadas.
“Apenas ayer que estuvo medio nublado por la tarde pues no me fue bien, (pero) todavía la semana pasada, que el sol estaba a todo lo que da, me fue muy muy bien. Vendimos mucho porque, pues, vendo las chamoyadas que refrescan en los días soleados. La gente pasa y se le antoja algo para quitarse la calor (sic), pero creo que lo que resta de esta semana no me va a ir bien por lo del huracán” aseguró Lidia Carrillo Acosta, quien se dedica a la venta de chamoyadas y troles en la colonia La Pradera de Cuernavaca.
La mujer dijo que la fruta de temporada es la que tiene más demanda: “tratamos de tener un poquito de todo y de lo que más piden, como el mango, la fresa, la sandía y el limón, pero cuando hay fruta de temporada pues sí compro más de esa y se vende bien. Cómo por ejemplo en marzo el mamey y el mango salen más dulces y así también hacemos no solo chamoyadas de agua, también de leche. Pero no solo vendo eso, también hacemos troles de varios sabores que, por cierto, están bien sabrosos”.
Entrevistada por La Unión de Morelos, la comerciante dijo que los precios de sus productos se mantienen igual que el año pasado. “Usted ya sabe que todo sube y lo que se ocupa aquí también, la fruta y la barra de hielo sí subieron. Nosotros damos el mismo precio que el año pasado porque gracias a Dios tengo quien me venda las cosas a un precio justo para mí y por eso tengo clientes que vienen a comprar bien seguido”.
“Yo ya quiero que esto del covid se termine este año porque, por ejemplo, el año pasado no nos fue muy bien, no compraban aunque hiciera calor y yo digo que era porque no tenían dinero y pues seguramente tampoco se querían enfermar. Sí, nos pasó a amolar pero confiamos en que ya está pasando y nos vamos a levantar de todo esto” dijo.
Carrillo Acosta aseguró que está buscando la manera de reducir el uso de plástico desechable, porque “aparte de que es un gasto y es caro, le invertimos mucho dinero en comprar los vasos, el popote y las cucharas para poder poner las chamoyadas y los troles. Siempre que tengo la oportunidad les digo a los clientes que están cerca que traigan su vaso o algún toper para poder llevarse la chamoyada y hay dos o tres que si lo hacen, pero no son todos”.