Operador de la Ruta 12 afirma que en una ocasión un hombre mayor lo escupió.

El pan de cada día de los operadores del transporte público es lidiar con las diferentes actitudes de las personas que utilizan este servicio, refiere Juan Castelar Santiago, quien trabaja como conductor en la Ruta 12.

En su actividad diaria –apuntó– ha recibido insultos por parte de los pasajeros que están de mal humor, pero también de los adultos mayores, que a veces se niegan a pagar su pasaje.

Asimismo, señaló que lo que más afecta a los operadores es aplicar los descuentos del 50 por ciento a las personas de la tercera edad, pues en ocasiones llegan a subir más de 15 en un recorrido, por lo que hay días en los que sólo se lleva 100 pesos a su bolsa.

“Una vez un señor me escupió. Se enojó porque le estaba cobrando lo de su pasaje y se molestó. Pero no puedo hacer nada; no le puedo contestar porque nos reportan y los patrones nos castigan. Por eso digo que uno ya está acostumbrado a las malas palabras y hay que trabajar de manera normal”, refirió.

Indicó que los comentarios negativos que ha recibido le generan estrés, al grado de que ha estado a punto de sufrir una parálisis facial, pero afortunadamente se atendió a tiempo.

“Yo creo que es por la carga de estrés y porque hacemos corajes con la gente”, dijo. Sin embargo, afirmó que también se ha encontrado con personas que le agradecen por el servicio.

Por su trayectoria de 22 años como operador del transporte público, aseguró que la situación económica ha disminuido de manera considerable con el paso de los años.