Luis trabaja como checador de rutas desde hace seis años
Al mismo tiempo en que cursaba el sexto año de primaria, Luis empezaba a trabajar como checador de “rutas” a lo que se dedica actualmente, pero afirma que su deseo es estudiar mecánica general en el sistema educativo militar.
Desde hace seis años se encarga de registrar el tiempo de diferencia que llevan los operadores de diferentes organizaciones del transporte público, que circulan por avenida Morelos en Cuernavaca.
Refiere que gracias a que trabaja en la informalidad tiene la oportunidad de estudiar y trabajar, pues no tiene que cumplir con un horario, como en los empleos formales.
Sin embargo, dice que por la crisis económica que ocasionó la pandemia de covid-19 tuvo que suspender sus estudios de nivel medio superior a un año de graduarse, debido a que sus ingresos económicos disminuyeron por la falta de pasajeros.
“Me faltaba un año para salir de la preparatoria y me salí porque se me complicaron las clases en línea, pero voy a regresar y después quiero estudiar mecánica en la militar”.
Por la emergencia sanitaria también se vio obligado a dejar su actividad en el transporte y buscó empleo en una empresa de servicios funerarios, donde laboró por un año como auxiliar general.
Parte de sus actividades -apuntó- consistían en preparar el cuerpo del difunto desde asearlo hasta sepultarlo en el panteón y aunque su labor era bien remunerada regresó a la calle.
¿No te daba miedo?
-No, porque yo iba a trabajar y nunca pensé en que me asustarían o que después no podría dormir.
El primer día en la funeraria -dijo- le tocó ir por el cuerpo del tío de una de sus amigas, pero no le afectó psicológicamente porque se limitaba a realizar su trabajo.