En los meses más difíciles de la pandemia Juan sólo reunía cien pesos al día.
Para hacer frente a la crisis económica que ocasionó la pandemia de covid-19, el taxista Juan Dorantes confiesa que se vio obligado a vender la mitad de un terreno que le dejó su madre, debido a que en los meses más críticos con mucho esfuerzo reunía 100 pesos en todo el día.
El trabajador del volante recuerda que cuando llegó la emergencia sanitaria apenas lograba realizar cinco viajes en todo el día, con los cuales apenas alcanzaba a juntar el dinero para comprar el combustible del vehículo, pero no para entregar la cuenta a su patrón.
La situación económica se complicó tanto que -dijo- tuvo que vender la mitad del terreno, herencia de su madre, para poder solventar los gastos de su casa.
“Cuando llegó la enfermedad la gente se encerró en su casa y por eso mismo no había pasaje, así que, para poder pagar los servicios como agua y luz y comprar lo básico para la comida tuve que vender un pedacito de terreno, porque tengo dos hijos que siguen estudiando y necesitan de mí”.
Aseguró que aunque laboraba más de ocho horas diariamente, con mucho esfuerzo juntaba entre 50 y 100 pesos y en ocasiones quedaba a deber la cuenta.
Actualmente -apuntó- la situación económica ha mejorado, sin embargo, no es igual a cuando no había pandemia.
“Poco a poco se va levantando y tenemos la confianza de que ahora que regresen a clases los estudiantes, mejore un poco más, pero también está el servicio de plataforma que nos quita clientes”.