La diputada Tania Valentina Rodríguez Ruiz encabezó hace cuatro años la entonces llamada Comisión de Trabajo y Previsión Social cuando el Congreso local trató de revertir las “pensiones doradas” otorgadas descaradamente por la LIII Legislatura.
La congresista -que se mantiene repetidamente en el cargo porque siempre es postulada en el primer sitio de las listas plurinominales por el partido que dirige de manera única- anunció que se habían abrogado las pensiones obtenidas de manera irregular.
Sin embargo, el procedimiento realizado estuvo plagado de errores y fue fácilmente anulado por los beneficiarios con amparos cuyas resoluciones obligaron a las autoridades a pagar las sumas que injustificadamente fueron aprobadas.
La historia del Congreso local es circular y solo da vueltas sobre sí misma, por lo que nuevamente Rodríguez Ruiz encabeza la citada comisión -que hoy tiene una ligera variación en el nombre- por lo que existe un temor fundado de que nuevamente los asuntos a su cargo se realicen de manera improvisada o incompleta.
La preocupación se hizo manifiesta cuando la legisladora señaló la enorme carga de trabajo que enfrenta y el poco personal capacitado del que dispone para realizar tareas delicadas.
La sociedad morelense aún paga cada mes las sumas inmerecidas que los exfuncionarios graquistas obtuvieron de por vida luego de que la justicia federal anuló la tristemente famosa abrogación.