Todos conocemos la Big Mac, la hamburguesa más famosa del mundo. Puedes comerte una prácticamente en todo el mundo. Pero más allá de ser una comida muy atractiva (y probablemente no muy saludable), se ha vuelto un índice de medida para calcular no sólo el poder adquisitivo de un país, sino además si su moneda está subvaluada o sobrevalorada. Sorprendente, ¿no crees?
El índice Big Mac fue inventado y publicado por la revista The Economist en 1986, nos ayuda a calcular el poder adquisitivo de cada país comparando el precio de esta hamburguesa en cada Mc Donald´s. Se eligió usarla ya que en todos los países cuesta casi lo mismo producirla y se usan los mismos productos para su creación.
Un ejemplo muy resumido de ello es que en México una Big Mac te cuesta $3.5 dólares y en E.E.U.U. $5.1, lo que nos indica que, en términos muy simplificados, el peso mexicano está subvaluado con respecto al dólar. Pero esto no quiere decir que si en un país es mucho más barata la hamburguesa que en otros, todos los habitantes de él se puedan dar el lujo de comprar esta hamburguesa, ya que el salario promedio no es el mismo en ellos. En México, un habitante con un salario promedio tarda 78 minutos en ganarse el sueldo para adquirir una Big Mac, mientras que en Hong Kong tardarían solamente 8.6 minutos. Lo que nos indica una disparidad muy grande en poder adquisitivo de las monedas de ambos países.
A pesar de contar con algunas limitaciones, el índice Big Mac es una buena herramienta para hacer una comparación rápida entre distintas divisas en temas de comercio internacional. Lo dejo como una reflexión.