Araceli García arremetió contra una comerciante, a la que intentó agredir físicamente.
Cuautla.- Poco después de la visita del gobernador Cuauhtémoc Blanco al mercado “Hermenegildo Galeana”, para verificar los daños causados por el voraz incendio registrado el martes 3 de enero, la presidenta del DIF municipal, Araceli García Garnica, protagonizó un zafarrancho al intentar agredir físicamente a una comerciante de ese lugar que intentaba acercarse al lugar donde habría una reunión, lo que provocó que familiares y empleados del Ayuntamiento la sujetaran y la sacaran custodiada del lugar.
Minutos después de que el mandatario estatal se retirara de ese lugar, se organizaba una reunión con los comerciantes y las autoridades municipales para seguir analizando el problema de la reactivación de actividades, pero el director de Industria y Comercio, Mauricio Ortega, trató de impedir que la comerciante Amalia Hernández Hernández se acercara y la empujó, a lo que la agraviada respondió con un reclamo, pues un día antes, el mismo funcionario hizo lo mismo para impedir su participación.
“Su sobrino de nombre Mauricio estaba a mi lado; me aventó tratando de impedir de que ingresara a una reunión con personas del mercado. Un compañero solicitó que se me permitiera el acceso, pero esa persona me lo vino a impedir; por lo tanto, me voltee y le dije que dejara de molestar porque desde un día antes utilizó la misma estrategia y desde ayer (el miércoles) le pedí el respeto”, señaló.
Ello provocó que la presidenta del DIF volteara y arremetiera en contra de la locataria con insultos e intentando agredirla físicamente, lo que fue impedido por una de sus sobrinas que cobra en el área de Comunicación Social y otros empleados que por la fuerza la sacaron de ese lugar.
“A mí lo que me hizo voltear fue el alboroto; vi que estaban deteniendo a una mujer y ella expreso: ‘¿Qué quieres con mi sobrino, pendeja?’ No me espanto de la palabra, es de uso común. Lo que me espanta es que viene de una persona que debe conducirse con respeto a la ciudadanía, que si bien es cierto es un ser humano, también es cierto que si ella no sabe controlar su manera de comportarse, lo que debiera de hacer por el bien de los cuautlenses, es dar un paso atrás y decirle a su esposo que en lugar de sumarle le está restando”, añadió.
El presidente municipal estaba lejos de su esposa y cuando fue avisado fue en su búsqueda para después regresar donde estaba Amalia Hernández. Cuando todos creían que le ofrecería una disculpa por el exabrupto de su esposa, ocurrió lo contrario.
“Posteriormente estaba platicando con los compañeros, cuando me dijeron ahí viene Arredondo. Él se acercó a mí con los brazos en la cintura y me pregunta: ‘¿Cómo estás?’ Y le contesto que en lo que cabe bien y me echa el brazo a los hombros y me pega su boca al oído y me dice: ‘No te metas con mi mujer’, y me da palmadas en la espalda.
”Ante esto lo que hice, lo detuve para que no se retirara y les informé a los compañeros que el presidente me había amenazado”, manifestó Hernández Hernández.
Al considerar que los dos acontecimientos constituyen una amenaza a su persona, la ofendida dio a conocer que presentaría una denuncia ante el Ministerio Público y culpó a Rodrigo Arredondo López de lo que le pudiera pasar a ella o a su familia.
Amalia Hernández culpó al alcalde Rodrigo Arredondo de cualquier cosa que pudiera pasarle a a ella o a su familia.