Comerciante lamenta que han caído sus ventas de tacos acorazados.

“Estoy preocupada porque siento que ya no vendo nada. Hoy llevo todo el día sentada esperando poder vender lo que ya hice y no llevo ni la mitad de mi comida… Pero no hay de otra, me tengo que aguantar porque sé que la gente no tiene dinero”, relató María Juana Estrada Velázquez, quien vende tacos acorazados, chilaquiles y gelatinas en la colonia El Empleado de Cuernavaca.

Entrevistada por La Unión de Morelos, la comerciante comentó que tiene que trabajar por las mañanas como empleada doméstica: “En las mañanas voy a planchar o lavar la ropa de una casa y ya a mediodía saco mi puesto para vender comida que hago durante la noche”.

La mujer mencionó que trata de dar precios justos para que pueda vender mejor sus alimentos. “Todo está muy caro; el gas sigue subiendo…. Toda la verdura y la carne están aumentando bastante, hasta el pasaje está caro. Yo no puedo dar tan caro porque si no, no me compran y tengo que mantener el mismo precio aunque le gane poco”.

La mujer dijo que ha tenido que moverse del lugar en donde antes vendía debido a los cambios de clima: “Ahorita ya no está lloviendo, pero hace unos días caía un aguacero y todo se me mojaba; luego el sol también me pegaba en la cara o en la espalda y me causaba dolores de cabeza. Decidí moverme de lugar para que no me afectara tanto, pero en mis ventas sí se reflejó porque yo creo que me van a buscar a donde estaba y ya no me encuentran”.

Lamentó que “a pesar de que estoy cerca de oficinas, la gente no viene a comer y prefiere irse a los restaurantes. A veces me pongo a pensar si les da miedo comer en la calle o por qué ya no vienen. Yo preparo la comida con mucho cuidado y con sabor para que la gente coma rico, pero no sé por qué no me compran” apuntó.

“Espero que la gente nos apoye y que aunque no sea a mí, pero si ven a alguien afuera vendiendo, que les compren algo aunque sea chiquito porque nosotros somos los que ahora necesitamos del apoyo de todos. Nosotros no tenemos el respaldo de una empresa, pero lo que sí tenemos son las ganas de trabajar y salir adelante”, remató María Juana Estrada Velázquez.