Alfredo afirma que no le pesa aplicar el descuento a las personas de la tercera edad
“Del pasajero vivimos y creo que es un derecho de todas las personas mayores. Si yo estuviera en sus zapatos, me gustaría que me hagan los descuentos. Para mí es hacer una buena acción, aunque no todos lo ven de esta manera. Hay que estar conscientes de que algún día vamos a llegar a esa edad”, expresó Alfredo, quien trabaja como operador del transporte público.
Dijo que durante el día suben más de diez personas con credencial del Inapam, pero no le pesa aplicar los descuentos del 50 por ciento porque está consciente de que llegará a esa edad.
Señaló que no ha hecho la cuenta de cuánto dinero deja de recibir por respetar los descuentos, porque, afortunadamente, siempre llega a su casa con dinero para la manutención de su familia.
De su actividad diaria -apuntó- se ha encontrado con todo tipo de personas, algunas que no están de acuerdo y señalan que conduce lento, pero no entra en discusión y hace un esfuerzo por brindar un buen servicio a los pasajeros.
Para Alfredo ser chofer es una labor estresante, porque el volante es una gran responsabilidad y, además, porque que diariamente hay personas que no utilizan los puentes peatonales y cruzan la calle con el riesgo de sufrir un accidente.