“Las ventas aumentaron ahora en el 15 de septiembre, ahorita no se vende lo normal y esperemos que para noviembre aumenten las ventas”, dijo de su negocio Teresa Ruiz, quien se dedica a la venta de huevo a las afueras del mercado Adolfo López Mateos (ALM) de Cuernavaca.
La mujer explicó que vende más el huevo por mayoreo que por kilo: “le surtimos a las tienditas. Todos ellos nos compran el huevo por mayoreo, lo piden por caja y les sale mejor que venir a comprar por kilo. Los que llegan a pasar por aquí que vienen a hacer su mandado, pues si se llevan de a kilo o tapa, pero son muy pocos”.
La locataria dijo que el precio del huevo es muy cambiante y eso afecta a sus ventas: “muchos nos dicen que prefieren gastar en otro tipo de comida y ya no buscan el huevo como primera opción”.
La mujer relató que también los proveedores sufren mucho con los bajos ingresos de sus productos, porque “siempre que vienen a surtir, nos comentan que varios han estado comprando muy poco y a veces nos les alcanza el dinero para volver a surtir en un corto tiempo a las tiendas”.
“También ya hay más competencia con la gente que vende huevo de rancho. Hay gente que lo vende más barato y pues unos dicen que es un poco más fresco que el que se vende aquí” apunto.
“Así siempre nos pasa, las ventas bajan mucho y los clientes que son frecuentes dejan de comprar por el tema de dinero. Espero que con el tiempo esto mejore” remató.