En vísperas de la Nochebuena, Felipe Lagunas empezó a trabajar como operador del transporte público, una labor que -reconoce- es cansada, porque trabajan largas jornadas; sin embargo, se mantiene al volante pues aspira poder conducir autobuses, para conocer otros estados de la república.
“Era repartidor de comida por aplicación y lo dejé porque me gusta manejar camiones. Pienso estar aquí (en la ‘ruta’) seis meses o un año y después quiero ver si puedo entrar a una línea de autobuses”.
Felipe, quien conduce una “ruta” de la empresa Autobuses OMSA Chapultepec, señaló que recibió capacitación durante dos días sobre el manejo de estos camiones; sin embargo, por la falta de experiencia los primeros días tuvo un percance vial, aunque no fue grave.
Aunque sabía manejar camiones de 3.5 toneladas, dijo que los nervios lo traicionaron y entonces entendió que no es lo mismo ver, que hacer.
“Se ve fácil, pero no es así. En la ‘ruta’ tienes que hacer de todo: cobras, entregas cambio, abres y cierras puertas y hay que estar al pendiente de los pasajeros y de la gente que se atraviesa en la calle. Además, hay que estar cuidando que los motociclistas no invadan tu carril. Por eso digo que no es tan fácil, pero me gusta”.
El trabajador del volante afirmó que está a gusto en este oficio, sin embargo, una desventaja es que tiene poco tiempo para estar con su familia, ya que diariamente se levanta a las cuatro de la mañana para empezar su jornada laboral y termina alrededor de las nueve de la noche.