La pieza arqueológica permanecerá un tiempo más en el Museo Regional de los Pueblos de Morelos.
El “Portal del inframundo”, la pieza arqueológica perteneciente a la cultura olmeca que fue recuperada después de varios años de su saqueo, no regresará por ahora a Chalcatzingo.
El director del Centro Morelos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Víctor Hugo Valencia Valera, reconoció que se había anunciado que desde el primer mes del año se iba a trasladar el monumento a la citada comunidad ubicada en el municipio de Jantetelco.
Sin embargo, también admitió que no será factible y que la “puerta” se quedará en el Museo Regional de los Pueblos de Morelos, al menos durante varios meses.
Dijo que a pesar de la promesa al pueblo de Jantetelco, la pieza no puede ser llevada al sitio del que fue sacada ilegalmente, porque primero será necesario dialogar y realizar mesas de trabajo con el ayuntamiento, hasta que se garantice un sitio adecuado para su conservación y apreciación.
Además, el titular del INAH en la entidad destacó que el portal entrará a un proceso de restauración, cuyo anuncio se hará próximamente.
“Esa pieza va a regresar a su lugar como se dijo, se va a cumplir, pero se tiene que restaurar… seguirá en exhibición en tanto, serán unos meses por bien de la pieza”, anotó el funcionario federal.
La “puerta al inframundo” fue repatriada el pasado 19 de mayo por el Gobierno de México desde Denver, Colorado (E.E.U.U.) y posteriormente fue trasladada a Morelos, su estado de origen, y se entregó exitosamente el 25 de mayo al museo en Cuernavaca.
El también llamado “monstruo de la tierra” o “pieza 09”, fue recuperada en Estados Unidos y forma parte de la cultura olmeca, considerada la “cultura madre” por ser la primera civilización mesoamericana, y tiene una antigüedad de más de dos mil 500 años, es comparable con las icónicas cabezas colosales olmecas. Se trata de una escultura en bajo relieve que mide 1,8 metros de altura y 1,5 metros de ancho con un peso de casi una tonelada.
“Representa a una criatura fantástica cuyas fauces abiertas simbolizan el acceso al inframundo y figuran el acceso a una caverna”, describieron especialistas del INAH.