Martín lamenta, también, los casos de las personas que no pagan su pasaje.
"Entiendo que los descuentos a las personas de la tercera edad los tenemos que hacer, no tengo problema; tengo a mis papás y sé que también llegarán a esa edad, pero lo que la gente no sabe es que el operador no tiene ningún beneficio del gobierno, sino que, al contrario tenemos que pagar los cinco pesos que se hacen de descuento", señaló Martín Rodríguez, quien trabaja desde hace 23 años como operador del transporte público.
Dijo que respetar los descuentos del 50 por ciento a pasajeros con credencial del Inapam afecta sus ingresos económicos, ya que diariamente por lo menos 50 personas de este sector abordan la unidad, por lo que en ocasiones con mucho esfuerzo reúne el dinero para el combustible.
Además, afirmó, hay personas que dicen "ahorita le pago" y no lo hacen, y otros que se suben y enseguida bajan porque se equivocaron de destino, pero las barras contadoras de pasaje ya contaron ese ingreso.
"Nosotros trabajamos más de doce horas y a veces no hay descansos. Tenemos que llegar a la base antes de las cinco de la mañana y, en ocasiones, sólo juntamos lo del diésel, sobre todo en vacaciones escolares, porque disminuye mucho el pasaje".
Martín, cuya trayectoria al volante es de 23 años, dijo que desde hace diez años se observó un aumento considerable en las tarjetas del Inapam, lo que afecta a la mayoría de los operadores porque el patrón pide la cuenta completa.