Negrete Labra explicó que los residuos biológico infecciosos (RPBI) son aquellos materiales generados durante los servicios de atención médica, que contengan agentes que puedan causar efectos nocivos a la salud y al ambiente.
En este sentido, indicó la importancia de que los Centros de Salud cuenten con las herramientas necesarias para que de manera práctica y fácil identifiquen, clasifiquen y almacenen temporalmente los residuos biológico infecciosos, así como la manera de implementar un programa de manejo interno.
Resaltó que la Semarnat realiza año con año un programa de wcapacitación sobre los generadores de residuos peligrosos, que permite reforzar principalmente el conocimiento de la Norma Oficial Mexicana NOM-087-SEMARNAT-SSA1-2002 que regula la identificación de los residuos, el envasado de los residuos generados, su almacenamiento temporal, recolección y transporte externo, tratamiento y su disposición final.
En Morelos, dijo, hay registrados mil 334 establecimientos generadores de residuos peligrosos, que producen aproximadamente cuatro mil 552 toneladas al año, de las cuales el 85% proviene de grandes generadores; el 13%, de pequeños generadores, y solo el 2%, de microgeneradores. De este total aproximadamente el 15% son de RPBI.
Finalmente, resaltó que contar con instrumentos reguladores hace posible poner reglas claras para la realización de las actividades que comprenden el manejo integral de los residuos peligrosos, desde su generación hasta su disposición final.