La institución dio a conocer que “el alcohol adulterado contiene por lo general, metanol (alcohol metílico o alcohol de madera), sustancia extremadamente tóxica, una pequeña dosis de esa bebida puede ser fatal. Por lo general el alcohol adulterado resulta atractivo al consumidor, por su bajo precio, por lo que se debe tener precaución.
Los efectos del metanol se empiezan a manifestar entre los 30 minutos o hasta 73 horas después de su consumo. En su inicio se confunde con una borrachera, pero es algo más grave, debido a que se presentan alteraciones visuales, que se manifiestan Copn signos que van desde una visión borrosa hasta ceguera, que puede ser temporal o permanente”.
El comunicado expone también que entre los efectos, destacan “también dolor de cabeza, mareo, convulsiones y una situación que puede evolucionar hasta un estado de coma. En algunos casos hay náuseas, dolor abdominal y dificultad para respirar. Un poco más tarde se manifiestan los daños en los denominados ‘órganos blandos’: cerebro, corazón, hígado y páncreas. Por último, el deterioro orgánico causado por el metanol da paso al mayor de los riesgos: la muerte”.