Alfonso de Jesús Alcalá Pineda, jefe del departamento de prevención y control de enfermedades de los Servicios de Salud del Estado de Morelos, informó que en esta época suele aumentar la incidencia de padecimientos diarreicos tanto por el calor como por las precipitaciones pluviales, toda vez que se acelera la descomposición de la materia y posible contaminación de alimentos.
Señaló que en lo que va del año, se han registrado alrededor de mil casos de padecimientos gastrointestinales, siendo la zona oriente donde se concentra la mayoría debido a factores climáticos.
Consideró que esta cifra está por debajo de la media del año pasado, aunque en estas fechas, enfatizó, se incrementan los casos entre un 15 y un 20% cada año.
Alcalá Pineda hizo un llamado a la población, especialmente a los padres de familia a extremar las medidas de prevención en cuanto a la higiene en la preparación de alimentos, lavarse las manos antes y después de ir al baño, y sobre todo cuidar el consumo de agua, verificando que sea hervida o purificada.
Además hizo notar la importancia de que se vigile la evolución de los padecimientos diarreicos en menores de 5 años, para evitar la deshidratación que en ese grupo de edad puede llegar a ser mortal.
Recordó que los sobres de suero vida oral se distribuyen de forma gratuita en todos los centros de salud del estado. Aseguró que el abasto de dicho recurso, así como de medicamentos para atender el aumento de estas enfermedades, está garantizado, lo anterior, luego de reconocer que hace un mes y medio hubo desabasto de sobres de suero. A decir del funcionario, ya se normalizó dicho suministro del suero en polvo.
Alcalá Pineda expuso que no se han registrado casos de mortalidad, precisamente, al prevenir los casos de deshidratación que era la causa fundamental de los decesos que se registraban en pacientes con diarrea hasta hace unos años.
Las autoridades de salud han referido que uno de los factores más importantes en el incremento de la incidencia de dichas enfermedades, es la posible contaminación de redes de distribución de agua potable, por lo que reiteraron el llamado a hervir o clorar el agua para uso humano.