En conferencia de prensa, las señoras, madres de estudiantes del plantel, entre ellas Elsa Benítez Arteaga, acusaron que desde hace siete años, la directora asumió el control de los recursos económicos, sin permitir que los comités de padres de familia dirijan el manejo de los fondos.
Acusaron que ha cobrado entre 150 y 160 pesos a cada uno de los más de 500 estudiantes matriculados, como supuesta cuota de inscripción, condicionando el trámite al referido pago.
Además, sostuvieron que para quienes no han podido cubrir ese monto, les amenaza con cobrarles intereses del 5 por ciento, y presuntamente maltrataría a los hijos de las familias que no han entregado el dinero por falta de recursos.
Las madres de familia mostraron documentos con los que han presentado sus denuncias ante autoridades del Instituto de Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM), y a los cuales, aseguran, no ha habido respuesta alguna.
Acusaron que además de los 150 pesos de cobro cuando inició el curso escolar, les ha pedido 160 pesos para la supuesta contratación de servicio de limpieza, cuando en el plantel existe un conserje y estaría prohibido permitir el acceso de personas externas por motivos de seguridad.
Aseveraron que en supuesta represalia por las protestas, la directora les informó que cancelaría el programa de enseñanza de inglés y algunos otros cursos, en detrimento de la formación de los alumnos.
De la misma forma mostraron un documento en el que se solicita un informe a la directora sobre la falta de medidas para garantizar la integridad de la visitadora de la Comisión de Derechos Humanos del Estado, Teresa Celina Solís Parra, quien habría sido agredida verbalmente por padres de familia que apoyan a la directora, cuando acudió a verificar acusaciones sobre presunto maltrato a estudiantes y cobros injustificados de cuotas.
En contraparte, un grupo de padres de familia de la escuela, que acudieron a La Unión de Morelos, apoyaron a la directora y acusaron que las madres inconformes de pretender obtener alguna posición, ya que una de ellas, la principal denunciante, fue tesorera en el pasado ciclo escolar y no logró repetir en el cargo.