“Ellos eran superiores en número, y además utilizaron tubos para terminar con la vida de don Nabor, que sólo defendió a su hija, porque era insultada por empleados de los juegos mecánicos”, dijo la Fiscalía, al explicar que el hombre de 42 años permaneció en coma varios días hasta que perdió la vida en el hospital José G. Parres de Cuernavaca.
En la audiencia intermedia la defensa dijo que demostrará que sus clientes son inocentes, y que fueron otras personas las que le quitaron la vida al hombre.
De acuerdo al expediente judicial JC/345/2013 la víctima la madrugada del pasado primero de septiembre caminaba con esposa e hijos por la avenida Vicente Guerrero del poblado de Tetlama, cuando una de sus vástagos fue agredida por varios jóvenes, lo que provocó la reacción de don Nabor que junto con su hijo defendió a la muchacha.
La Fiscalía aseguró que con testigos acreditará que los agresores utilizaron tubos, con los que golpearon al hombre al que seguían agrediendo en el piso, mientras que Javier Ayón Marco a gritos le pedía a los agresores que le dieran muerte.
Los familiares pidieron auxilio a la Policía, que detuvo en el lugar a los encargados de los juegos mecánicos, que son padre e hijo, mientras que una ambulancia trasladó al hospital al herido.
La esposa de la víctima adelantó que acudirá a narrar los hechos, así como otros seis testigos más, pero la defensa también anunció que usará a los mismos testigos para acreditar que sus clientes no participaron en la riña.
“Su señoría, estamos ante un caso totalmente ventajoso, donde no se le permitió a la víctima defenderse, además de que él reaccionó así porque luchó por el honor de su familia”, dijo la Fiscalía.
Tanto la defensa como la Fiscalía acordaron eliminar algunas pruebas documentales, como el acta de nacimiento de la víctima, la de matrimonio y otras más, en el entendido de que otros documentos avalan que este perdió la vida de manera violenta.
Los detenidos se han negado a rendir su declaración ante el juez, pero su abogado adelantó la posibilidad de que lo hagan frente a un Tribunal para esclarecer los hechos.
“Por lo pronto, su señoría, adelantamos que pedimos la reparación del daño por más de dos millones de pesos, pues la víctima era un hombre productivo, que ganaba más de seis mil pesos mensuales, tal y como quedará acreditado con talones de nómina del ayuntamiento de Cuernavaca que habremos de presentar”, adelantó la fiscalía.
Finalmente la juez dio por aceptada las pruebas y será la próxima semana cuando inicie el juicio oral correspondiente.