A nivel internacional esta conmemoración se lleva a cabo en la segunda semana del mes de marzo, cada año, por tanto en esta ocasión se desarrolla del 10 al 16 del presente mes, con diversas actividades que tienen como finalidad el hacer conciencia sobre este tipo de padecimientos y la importancia de continuar con la investigación en el campo.

Los universitarios morelenses (alumnos de las Facultades de Psicología, Biología y Ciencias) participaron con una exposición interactiva en el zócalo de Cuernavaca este jueves y hoy en Jiutepec. Los sentidos, la memoria, la coordinación, entre otras funciones del cerebro, fueron puestas a prueba en diversos módulos con actividades abiertas a quienes se acercaran a recibir información.

Bernarda Téllez Alanís, académica de la Facultad de Psicología de la UAEM, explicó que el propósito es dar a conocer de manera sencilla y divertida las funciones del cerebro, así como la existencia, prevención y tratamiento de enfermedades del sistema nervioso central.

Los universitarios expusieron que las enfermedades más comunes en Morelos son la epilepsia, el Alzheimer que aparece en la etapa de envejecimiento, y en la etapa adulta y las de mayor incidencia (aunque no precisó tasa), son las consecuencias por traumatismos craneoencefálicos.

Las más comunes en la etapa de la infancia, son las secuelas por hipoxia, primordialmente por falta de oxígeno en el nacimiento o por ahogamiento.

En las exposiciones se planteó que lamentablemente en Morelos y México no existe amplia cultura en relación a enfermedades cerebrales, que pueden ser detectadas de manera temprana y tratadas, pues en muchas ocasiones existen factores económicos y sociales, como la ignorancia, que condicionan el acceso.

Otro ejemplo sobre la importancia de estas labores de difusión, explicó la docente, es que los pacientes acuden al médico, reciben tratamiento, pero posteriormente, ya no siguen con terapia psicológica.

"Los padecimientos son atendidos en todos los hospitales en Morelos, pero lo que no se sabe, es que los pacientes pueden contar con la ayuda de neuropsicólogos, que pueden darles rehabilitación en cuanto a secuelas. Por ejemplo, si hay problemas de memoria, o en el lenguaje o terapias sobre percepción o alternaciones en movimientos, “y esa es nuestra labor, hacer que se conozca y aportar a que las personas tengan mejor salud y