Ayer, a las 14:00 horas, en la sala tres de Juicios Orales, iba a celebrarse la audiencia de suspensión condicional, pero la misma fue pospuesta, a petición de la Fiscalía Adscrita a la Zona Metropolitana, que afirmó que dos de los reporteros agredidos no pudieron ser notificados.

Al iniciar la audiencia, el imputado solicitó al juez que conoce del asunto, Eddie Sandoval Lomé, que sus datos generales e imágenes no aparecieran en los medios de comunicación, lo que fue aceptado por el juzgador porque indicó debe prevalecer el principio de inocencia.

Ángel “N” decidió cambiar a su defensor particular y fue éste quien promovió la celebración de la audiencia, en la que propondrá la reparación del daño, es decir, el pago de 500 y mil pesos para cada uno de los reporteros agredidos y solicitar ahí mismo la suspensión condicional del proceso, que es uno de los beneficios que establece la justicia adversarial para aquellos que no cometieron un delito grave y que lo han hecho por primera ocasión.

Lo anterior implica prácticamente dar por terminado el procedimiento.

Al inicio de la audiencia, el fiscal José Manuel Serrano Salmerón pidió al juzgador suspender la audiencia, pues afirmó que la dependencia sólo pudo notificar a los reporteros Maciel Calvo y Antonio Rivera, pero no logró hacerlo con Jorge León y Jaime Salomón Hard.

“Su señoría: pedimos un lapso pertinente para hacer las notificaciones que nos hacen falta”, solicitó el fiscal, mientras que la defensa dijo no tener ninguna objeción.

El juez pidió a los dos reporteros ponerse de pie y les hizo saber que la audiencia tendría lugar el próximo miércoles 7 de mayo. Al término de la audiencia, los reporteros ofrecieron una improvisada rueda de prensa en la que señalaron que la denuncia, por las agresiones de las que fueron objeto, no fue para obtener dinero, “sino para que sea respetado el libre ejercicio de la libertad de expresión, que es incluso una garantía individual plasmada en la Constitución General de la República. No nos interesa los mil o 500 pesos, sino que se dé un mensaje a la sociedad de que la verdad no se calla golpeando periodistas”, agregaron.

Los cuatro reporteros fueron agredidos el pasado 20 de marzo por habitantes del municipio de Amacuzac, quienes se manifestaban en apoyo al diputado local por el PT Alfonso Miranda Gallegos, quien ha sido señalado de tener presuntos nexos con la delincuencia organizada.

Ángel “N” es acusado por la Fiscalía General de haber incitado a los habitantes de Amacuzac a agredir a los reporteros y evitar con ello que se grabara la manifestación.