“Es un pago de alrededor de mil pesos el que reciben según el lugar a donde tienen que prestar el servicio y si tienen que esperar a las personas para regresar, que normalmente así es, pero los permisionarios ya no quieren porque en ocasiones no reciben ese día su pago”, aseveró.
Indicó que en ocasiones es él quien acuerda los servicios y les pide a sus agremiados que los realicen, por lo que ha tenido que dar la cara y pedirles que esperen dicho pago algunos días.
“Es por esta situación que los permisionarios ya no quieren hacer servicios especiales o particulares, prefieren que sus choferes realicen su recorrido normal de Temixco a Cuernavaca y viceversa, ya que al menos ahí tienen la seguridad de que tendrán dinero para pagar el salario del operador y comprar el combustible del día siguiente”, refirió.
Y es que destacó que prácticamente sus agremiados van al “día” con los gastos que generan sus unidades, principalmente por mantenimiento y compra de diesel.