En conferencia de prensa, los representantes de "Códice" y de "Cidhal" Eduardo del Castillo Valadez y María Luis Becerril Straffon, respectivamente, sostuvieron que la legislación en Morelos es clara, al señalar que se tienen que realizar en coordinación con la iniciativa privada campañas permanentes de información, concientización y difusión para prevenir el uso y consumo del tabaco y hasta ahora –aseveraron- no se ha cumplido de manera cabal.
Recordaron que la reglamentación ordena a los Servicios de Salud de Morelos a llevar a cabo dichas campañas de forma permanente y a difundir la existencia de dichos ordenamientos, los que contemplan la existencia de espacios 100% libres de humo de tabaco y los números telefónicos de denuncia, cuando en un establecimiento no se cumple o se viola la norma.
"Llamamos a las autoridades a ser más creativas porque su pretexto de que no tienen dinero no es convincente, ni aceptable. Hemos hecho un estudio en más de 15 ciudades del país y hemos determinado que una campaña sencilla pero efectiva en medios de comunicación local puede costar 20 millones de pesos, pero eso apenas representaría el 0.05% del presupuesto anual de salud y representa un costo mucho menor al que significa el tratamiento de pacientes con enfermedades asociadas al consumo de tabaco, que suma más de 120 millones de pesos", aseveró el representante de Códice.
Becerril Straffon apuntó que de acuerdo con cifras de un estudio del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) del 2009, en Morelos mueren dos personas diariamente por afecciones relacionadas. Detalló que en un año hay 828 casos de muerte por cuatro de las principales enfermedades asociadas al uso del tabaco, la mayor mortalidad se refiere a infarto agudo al miocardio con 320 muertes, por enfermedades pulmonares obstructivas, enfermedad cerebro vascular y por cáncer de pulmón, que en ese año llegó a 56 muertes.
Comentó que es probable que una vez que entró en vigor la ley, podría haber una disminución, al referir que en otros países políticas similares han indicado que los egresos hospitalarios tan sólo por infarto agudo al miocardio, disminuyen entre 15 y 20%.