Lo anterior fue dado a conocer por la delegación Morelos del Instituto Mexicano del Seguro Social, que emitió una recomendación a la población para extremar las precauciones en la selección de los productos que habrá de consumir.
Los especialistas explicaron que “las setas son las que con mayor facilidad se pueden confundir con las especies venenosas por su estructura; sin embargo, hay otras que a simple vista se nota que son altamente tóxicas, pues son de color rojo, amarillo o verde, muy atractivos a la vista, pero de sabor desagradable”.
“Los champiñones que son inofensivos, se caracterizan porque son de color marfil, su cabeza está definida en forma de sombrero, con un tronco o cuerpo gordo y corto. Las setas, muchas de ellas comestibles, son de forma de sombrero, llegan a medir de 10 a 15 centímetros y son delgadas”.
Las manifestaciones de intoxicación por hongos, refirieron, son diarrea y vómito, síntomas que se presentan después de aproximadamente ocho horas de su consumo.
Las especies venenosas que con mayor frecuencia confunde la población son la “amanita virosa, la amanita verne y la amanita moscarie”, esta última, destacaron los médicos, es la más peligrosa, puesto quien la ingiere puede presentar mejoría, pero después de dos horas presenta ictericia generalizada (la persona se pone amarilla) y sufre dolor a nivel de la región hepática, afectando al sistema nervioso central.
La medicina tradicional tiene su método para identificar los hongos venenosos: consiste en hervirlos una hora con una moneda, y si ésta se pone negra o se oxida, no de deben de comerlos.
Y es que el riesgo de confusión es alto, si se toma en cuenta que existen 250 mil especies de hongos y sólo hay 360 tipos de setas inofensivas, en tanto que los botánicos han clasificado sólo 22 especies comestibles, informó la institución.