El sorprendido y feliz padre trabaja como empleado en una empresa distribuidora de medicamentos y la madre, de 25 años de edad, es enfermera en un hospital público. A decir del joven, ambos ganan el equivalente al salario mínimo profesional y planea buscar otro empleo para sostener a su ahora numerosa familia.
Desde las primeras semanas, con el primer ultrasonido, se dieron cuenta de que se trataba de una gestación múltiple y decidieron seguir, pues no tenían hijos. El embarazo de Ofelia fue cuidado por médicos del ISSSTE Morelos, por lo que tuvo que cuidar su alimentación y tenían previsto que podrían ser prematuros.
"No nos han dicho por qué son cuatro hijos; nos dicen que probablemente ella tomaba muchos anticonceptivos, pero no es así. Tardamos dos años antes de decidir ser papás… No recurrimos a tratamiento de fertilidad ni nada; sólo sé que en mi familia hay unos tíos que fueron cuates, pero tampoco nos han asegurado que ésa haya sido la causa", explicó el papá.
El hombre, técnico en Informática, narró que por ahora él y su esposa rentan una casa, pero tendrán que buscar un lugar adecuado para los bebés y un nuevo empleo porque el sueldo de la pareja no es alto.
"Sí lo he estado pensando, pero ahora sí que donde comen dos, comen tres y cuatro y cinco… y pues ahora seis".
El alumbramiento fue por cesárea, nacieron tres niñas y un varón; él es el más pequeño –apenas pesó 590 gramos– y los cuatro se encuentran en un área de cuidados especiales, donde permanecerán en incubadora, pues nacieron a los seis meses y sus pulmones aún no han madurado, según explicaron los médicos a la familia.
Hasta ahora los padres sólo tienen asegurados dos de los cuatro nombres: una de las nenas se llamará Carolina (por la empresaria y diseñadora de modas) y el bebé Eduard (por el padre, "pero en inglés"). Todavía no deciden el de las dos hermanitas ni tampoco quiénes serán los ocho padrinos.
"Ahorita pensábamos en eso, que son dos padrinos por cada bebé; pero antes, pues esperamos que primero Dios, salgamos todos bien de aquí del hospital y luego… pues ya veremos lo demás", ruega viendo el cielo, el sonriente papá de los cuatrillizos.