La audiencia fue celebrada el pasado viernes 20 de junio en la Sala Uno, y en la misma el defensor público insistió que la autoridad no tenía ni un solo indicio para presumir que Eduardo “N”, pretendió cometer el secuestro.
Y es que de acuerdo a los antecedentes de investigación presentados por la Unidad Especializada Contra el Secuestro, el día de la detención realizaban una investigación en la colonia Lázaro Cárdenas de Xochitepec.
Los agentes aseguran que escucharon gritos de un hombre que indicaba que pretendían asesinarlo o bien secuestrarlo, así que acudieron al auxilio, sin embargo, en cuanto los tres sujetos que sometían a la víctima se dieron cuenta de su presencia, intentaron huir.
Dos de ellos se subieron a una camioneta donde se supone pretendían subir a la víctima y Eduardo, abordó una motocicleta en la que intentó escapar, pero al frenar el vehículo derrapó porque había arena en el lugar, lo que permitió la detención del joven de 24 años.
La víctima fue resguardada en la patrulla de los investigadores, pero cuando regresaron al lugar con el detenido, éste se había marchado.
En la audiencia del pasado viernes el imputado se negó a rendir su declaración sobre los hechos, pero su defensor alegó que las pruebas no eran suficientes, pero además la víctima no rindió testimonio sobre los hechos.
“¿Por qué presumir que lo iban a secuestrar o asesinar?. Pudo tratarse de un problema de tiempo atrás. No sabemos”, alegó el abogado.
Lo anterior convenció a la juez de Control que determinó no vincular a proceso al detenido, pero en su resolución dejó abierta la posibilidad de que la Fiscalía General del Estado (FGE), pueda continuar con la investigación y si hay procesos pueda formularse cargos en contra del hoy liberado.