Juan Carlos Valencia Vargas, secretario ejecutivo de la dependencia, prácticamente advirtió a los alcaldes y sus representantes, que las finanzas de los ayuntamientos están en condiciones muy complejas y que sólo podrán responder en un esquema de coordinación con el estado a problemas tales como cortes de suministro de energía eléctrica y, por tanto de suministro del vital líquido, por ejemplo. Lo anterior, al inaugurar un curso sobre cultura del agua que fue dirigido a los próximos ediles.
En entrevista, el funcionario detalló: “El problema del agua en Morelos no es de disponibilidad, sino que los servicios de los sistemas de agua municipal ya están rebasados: la mayor parte de ellos operan con números rojos, con servicios deficientes, no tienen ingresos ni siquiera para dar una adecuada operación y mantenimiento a los sistemas ya existentes. De ahí que les están constantemente, les cortan la luz en los pozos, no pueden reparar una fuga, no pueden cambiar una bomba, etcétera. Necesitamos trabajar en la eficiencia y por eso les pedimos el compromiso”.
Valencia Vargas explicó que en el presupuesto de la Federación de 2016 se asignaron 350 millones de pesos para obras de agua potable, drenaje y saneamiento, así como 31 millones para obras de infraestructura hidroagrícola. Los gobiernos estatal y municipales tienen que aportar alrededor de 15 millones de pesos para atraer la totalidad del monto federal; el resto, la Federación a través de la Comisión Nacional del Agua.
Por lo tanto, los municipios deben aportar 75 millones de pesos, por lo que se les pide que aporten el 20% de las obras que planteará la administración estatal “de manera conjunta con ellos”.
El secretario aseguró que ya ha dialogado con 24 de 33 alcaldes para trabajar en este esquema y esperan sumar la cantidad total para acceder a la bolsa federal.