Cabe recordar que el año pasado hubo manifestaciones de inconformidad, pues la parte oficial contrató seguros que -según las aseguradoras- no contemplaron daños por plagas, lo que habría dejado desprotegidos a los campesinos ante la crisis por la plaga del pulgón amarillo.
El titular de la dependencia, Roberto Ruiz Silva, indicó que ayer jueves en la Ciudad de México se acordó con las instancias federales plantear a los productores un esquema de aseguramiento que implica que ellos paguen una parte del costo de la póliza.
“Los productores que así lo decidan, en lugar de aspirar a los mil 500 pesos que recibieron el año pasado por gastos catastróficos, puedan recibir entre seis mil y siete mil pesos. Por ejemplo un productor de sorgo pagaría 65 pesos y uno de maíz 130 pesos por hectárea. Lo vamos a empezar a promover a partir de ya. Los que no deseen estarían sólo con el seguro de gastos catastróficos, recibirán sólo mil 500 y por esos casos”.
Hacienda pagaría hasta 45% de la prima, el gobierno federal 30%, el estado el 10% y el productor el 15%. “Si logramos que algunos municipios se solidaricen el productor pagaría como el 7% o 10% del costo de la prima. El costo comercial de un seguro así es de alrededor de 530 pesos”.
Argumentó que el año pasado el conflicto fue porque “el seguro contratado fue sólo por sequía. Nunca se había dejado de proteger por plagas; por alguna razón extraña no se contrató, entonces los productores afectados quedaron sin esa protección”. El año pasado 8 mil 500 hectáreas estuvieron en el esquema fallido con la aseguradora Agroasemex.
Estimó que en Morelos hay cuando menos 25 mil productores de sorgo y maíz, pero el seguro se podría ampliar a otros cultivos. Pero podrían entrar a ese esquema alrededor de 40 mil hectáreas.