Luego de que la Secretaría de Salud federal emitió la alerta sanitaria en México por diabetes y obesidad, las autoridades locales intensificarán las labores de detección oportuna, como parte de la estrategia nacional, que tiene como meta frenar el crecimiento exponencial de estas afecciones.
La titular del ramo en el estado, Patricia Mora González, destacó que el objetivo primordial es prevenir tanto la diabetes como la obesidad y sobrepeso; éstos últimos son factores directamente asociados a la diabetes y otros padecimientos como la hipertensión, enfermedades cardíacas, entre otros.
Cabe recordar que el pasado 14 de noviembre, la SS dio a conocer dicha alerta epidemiológica para todo el país, debido al persistente incremento de las muertes asociadas a dichos padecimientos. Según las cifras oficiales, entre los años 2014 y 2015 la cifra de decesos pasó de 94 mil a 98 mil 450 personas.
Además, los datos oficiales más recientes indican que la atención médica directa a una persona con diabetes bajo control, implica un gasto de alrededor de 100 pesos al año; pero quienes ya están en tratamiento de hemodiálisis (por deficiencia renal crónica asociada a la diabetes) cuestan al sistema de salud 320 mil pesos en promedio.
La secretaria de Salud especificó que en Morelos el número de pacientes que requirieron diálisis peritoneal aumentó un 857%, y es que detalló que en el año 2012 los Servicios de Salud en Morelos tenían un total de 35 pacientes a quienes se les daba dicho tratamiento, y en el 2015 la cantidad creció hasta las 335 personas.
En cuanto a obesidad, la funcionaria estatal refirió que en México alrededor del 70% de los adultos ya presentan esa condición o tienen sobrepeso. En adolescentes el indicador llega al 30% y ya se ha identificado este problema de salud en el 10% de los menores de cinco años de edad.
Informó que tras la declaratoria de alerta nacional, en todas las entidades se trabajará en una misma estrategia nacional que abarca acciones desde la prevención, con campañas informativas para impulsar un estilo de vida saludable con una buena alimentación y la práctica cotidiana del ejercicio.
Pero otra parte del plan nacional y que compete directamente a los equipos de salud del estado, es la detección oportuna. De tal manera que se proyecta fortalecer las tareas de pruebas de glucosa y comenzar el manejo adecuado de pacientes desde la etapa de prediabetes o preobesidad, es decir, cuando las personas comienzan a tener niveles altos de glucosa para no esperar a que lleguen a una etapa avanzada. De igual manera se va a realizar la búsqueda intencionada de pacientes que ya tienen sobrepeso, para prevenir que lleguen a la obesidad.
Recordó que hay otras líneas de trabajo que son del orden federal, que la población debe tomar en cuenta, como las políticas de etiquetado de los alimentos, para que las personas puedan identificar los altos contenidos de grasas y azúcares y hagan un consumo responsable.
Mora González comentó que se reforzará el trabajo que ya se ha hecho con municipios, con las demás instituciones como las educativas, por ejemplo, así como con los comités de salud en las comunidades.
Con la declaración de emergencia se focalizarán los esfuerzos y recursos para generar un mayor impacto y de esa forma cumplir la meta de contener el crecimiento acelerado de la incidencia de las citadas afecciones.