La Unión de Morelos contactó a la jueza, quien señaló que legalmente no tenía ningún impedimento para postularse paralelamente por la magistratura y por el cargo de juez oral, pues reúne los requisitos legales para ello.
Nacida en Cuernavaca en 1968; licenciada en Derecho por la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), con posgrado en materia civil, inició su carrera judicial en 1989 como mecanógrafa y poco a poco fue ascendiendo como oficial judicial, secretaria de acuerdos, secretaria de estudio y cuenta. Durante un breve lapso laboró como secretaria del Tribunal Unitario del Décimo Octavo Distrito Judicial de la Federación y posteriormente retornó al Tribunal Superior de Justicia.
Está en su derecho pero creemos que más es víctima de su ambición. Esta inscripción o participación alterna no daña sus derechos, pero retrata a alguien que no define o ha definido el rumbo a seguir. De juez oral a magistrado, sin cumplir con el primer objetivo, cuando se ha avanzado y se daba por hecho que tenía un lugar bien ganado, ahora genera exactamente lo contrario de su resultado: desconfianza.
Desafortunadamente, los espacios que se tienen especialmente diseñados para quienes han cumplido en la vida profesional, para aquellos que han demostrado saber resolver problemas a lo largo del camino jurídico en este caso, que ya han sido ubicados socialmente y calificados por su desempeño, ahora se ven ocupados por tal vez personalidades de alta capacitación pero baja experiencia.
Por eso ver hoy en el Senado de la República algunos escaños ocupados por jóvenes que apenas inician en política y que su representación en verdad está muy alejada de entender la problemática y necesidades de sus respectivos estados, es totalmente reprobable.
Lo mismo pensamos de las magistraturas. Deben ser espacios en donde no quepa duda de sus resoluciones; en dónde la capacidad vinculada a la experiencia, no permita sospechas y que independientemente de que una resolución nos favorezca o no, entender que no tiene otro sustento que el jurídico.
Remata nuestro diario: “a decir de algunos abogados y aspirantes, generalmente en estos procesos pesan más las inclinaciones políticas que los méritos personales, las trayectorias judiciales y académicas de los concursantes”.
Cuidado con manchar otro proceso. El de jueces orales ya tuvo su tropiezo.
Al aire
Ante la oscura forma en como quedó regulado el Derecho de Réplica en Morelos, con la inclusión del artículo 69bis, en el Código Electoral, y al verse sorprendidos prácticamente todos los diputados, menos el “autor” de la propuesta, Julio Espín, seguramente se dará marcha atrás a la amenazante reforma.
En ello trabajamos. Pendiente la Ley de Seguridad Social y Protección de los Periodistas en el Estado de Morelos; hay confianza en que esta semana será presentada ante el pleno del Congreso.