Tlaltizapán.- El perro pitbull que provocó la muerte de un menor de tres años de edad por mordedura, en la colonia El Mirador de este municipio, será sacrificado con una inyección letal la mañana de este miércoles.

Tras los hechos, el pasado 28 de diciembre por la noche, el animal fue incautado por personal de protección civil del Ayuntamiento, quien por disposición de la dirección de salud local y la estatal, será inmolado.

El director de protección civil de la comuna, Francisco Espinoza Salgado, refirió que el 29 de diciembre 2016, la Policía Ministerial les solicitó su intervención para mantenerlo a resguardo, en tanto se realizaban las investigaciones.

“Recibimos una llamada la semana pasada de que la dueña del perro ya había salido, porque estaba detenida, y que procediéramos al protocolo que lleva protección civil. Y aquí, junto con el área de salud, se determinó que al perro se le va a aplicar la eutanasia, la inyección letal, para que este perro no vaya ocasionar en el futuro otra pérdida humana, porque por su raza, es un perro agresivo, que no puede estar ni salirse a la calle”.

Señaló que el can será inoculado este miércoles a las diez y media de la mañana en el rastro local, donde actualmente se encuentra a resguardo.

Aseguró que personal de la Secretaría de Salud estatal estará presente, porque le harán un estudio “del cerebro o algo así”.

El funcionario negó que hasta el momento haya recibido algún tipo de petición de alguna sociedad protectora de animales.

“No hemos recibido nada de eso, de hecho, todos los comentarios de las personas que han visto al perro es que ese animal no debe de permanecer con vida”.

Aseguró que la familia tampoco lo ha reclamado. “La familia no vino para nada, sólo nos lo entregó de buena manera. Al perro se le ha dado la atención pero ese va a ser su final”.

El director estimó que el animal tiene aproximadamente de año y medio a dos años de edad.

Destacó que quienes tengan este tipo de perros, no deben dejar que salgan a la calle, porque pueden ser muy agresivos y citó el caso de la colonia Cuauhtémoc, de la cabecera municipal, en donde una familia tiene un pitbull llamado “toreto” que ya ha acabado con la vida de ocho perros de la colonia.

Recordó también el caso de dos perros bull terrier, que atacaron a dos señoras y los vecinos, molestos, los mataron a machetazos.

El 28 de diciembre del año pasado, el pequeño Rubén, de casi 3 años, falleció tras el ataque del perro “otto”, que este miércoles será sacrificado.