Zona poniente.- En los municipios de Tetecala y Miacatlán decenas de familias han sido desalojadas de sus viviendas para garantizar su integridad física ante los daños estructurales que presentan los inmuebles; entre los damnificados está el temor de cómo volverán a edificar su casa.
En el caso de Tetecala, al menos 28 viviendas presentaron fallas estructurales, cinco de ellas han sido derrumbadas para evitar que causen más daños. Las familias tienen incertidumbre de cómo levantarán su hogar de nuevo.
El párroco del municipio, Mariano Arriaga, lamentó la situación que se vive aún en Tetecala, ya que –dijo-- el sismo se registró justo en un día y la “hora pico” de la plaza tradicional (tianguis de los martes), donde el área del zócalo se encontraba abarrotada.
Comentó que entre la población se vivieron momentos de pánico por el derrumbe de estructuras, incluso dos mujeres murieron al caer sobre ellas escombros.
En el caso de la iglesia de la cabecera municipal San Francisco de Asís, el sacerdote estimó que presenta daños severos en tres cuartas partes de su construcción, con riesgo de derrumbe del área del campanario. “Es una iglesia que data del siglo XVIII, un edificio antiguo que ya presentaba deterioro y ya no aguantó este sismo”, dijo.
Agregó que hasta el momento no ha llegado ni personal de Protección Civil ni del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), pese a que este edificio se encuentra dentro del patrimonio cultural del municipio, por lo que ha sido clausurado el acceso para evitar riesgos. “Pero el riesgo, el latente, el campanario podría caerse, ya se cayó el reloj y en el interior presenta grietas graves que podrían provocar que la estructura cayera”, citó.
Mencionó que por el momento no han tocado nada, han dejado todo como quedó; sin embargo, reconoció que deberán tomar acciones ya que está próxima la feria del santo patrono el 4 de octubre y habrán de emprender las celebraciones eucarísticas. “Se logró sacar las bancas, las imágenes de los santos, lo más que pudimos, y se está considerando habilitar un espacio en la parte exterior para llevar a cabo las celebraciones”, señaló.
Por su parte, Martineano García Méndez, vecino de la avenida Benito Juárez en la cabecera municipal, cuya barda perimetral de su casa será demolida por los daños tras el sismo, relató que desde el mediodía del martes se vivieron momentos de tensión y miedo. “Toda la gente se asustó. Yo estaba en el zócalo con otra persona, cuando me dijo que estaba temblando; era martes, día de plaza, la hora de la salida de los niños de la escuela, todo lleno; todos se volvieron locos, unos corrían, otros se hincaban. Nosotros estábamos sentados cuando empezamos a sentir; nos tuvimos que agarrar del muro porque creímos que nos iba a tirar. Se volvió un caos cuando comenzaron a caer los pedazos de material de la iglesia; nos quedamos sin luz, llegó hasta la madrugada; nos quedamos sin servicio telefónico y ha estado fallando el agua”, apuntó.
Relató que debido a que el terremoto ocurrió cuando se desarrollaba el tianguis tradicional de los martes en el zócalo y las calles aledañas, no se pudo brindar auxilio oportuno a las mujeres a las que les cayó el área conocida como los arcos, que se ubica en la parte posterior al mercado, por lo que murieron en el lugar.
Por su parte, otra vecina de la calle Abasolo -donde por lo menos 10 viviendas resultaron afectadas y tres de ellas son demolidas por el riesgo que representan- teme no contar con apoyo para volver a levantar su casa. “Protección Civil municipal determinó que se tiene que derrumbar; es nuestra casa, nuestro patrimonio. Soy madre soltera y vivía ahí con mi hija, y ahí tenía mi negocio que era nuestro sustento económico, hoy lo perdemos todo”, relató.
El grupo de vecinos de la calle Abasolo de la cabecera municipal comentó que no hay certeza de que tendrá apoyo para volver a construir sus casas, simplemente están siendo demolidas porque están severamente dañadas en su estructura.
“Nos han dicho que vendrá el gobierno estatal, que se nos apoyará, que se están contabilizando los daños, que hay albergue en el auditorio municipal, que se nos dará comida y cobijas, pero no se nos dice sí nos ayudarán a volver a levantar nuestras casas, mientras tanto nos estamos trasladando para instalarnos con familiares y amigos”, dijo una de las afectadas.
Los trabajos de remoción y retiro de escombro en la cabecera municipal de Tetecala se han realizado hasta por 10 horas.