Jojutla.- La gran cantidad de escombro que aún permanece en inmuebles derribados se debe a que tienen que llevarlo hasta el lugar autorizado, en Santa Rosa 30, Tlaltizapán, argumentó el regidor Arnoldo Heredia Romero.

“Recuerdo que dije que el 15 de noviembre se iban a terminar las demoliciones, y sí, se están terminando, tenemos el 95 por ciento de ellas, al menos en las zonas con mayor cantidad de daño”, dijo.

Reconoció que lo que se ha convertido en un “cuello de botella” ha sido el retiro del escombro.

“En retiro de escombro, estaremos en un 60 por ciento y aún nos falta un 40 por ciento”.

El funcionario prometió a que a finales de este mes se retirará todo el cascajo para que se abra cuando menos un carril de la avenida principal de la ciudad.

“En el circuito comercial del centro de Jojutla, no debe pasar del fin de mes cuando se pueda ya circular. En la reconstrucción hay algunas fachadas que, para evitar el riesgo, nosotros habremos de balizar y entonces tener al menos un carril de un lado y del otro, para que podamos tener abierta la movilidad del primer cuadro y el circuito comercial Constitución, Josefa Ortiz de Domínguez, Himno Nacional y Pensador Mexicano”.

Destacó que inicialmente el problema para retirar el escombro era la falta de camiones y ahora es lo alejado del sitio oficial de disposición de residuos. En el primer caso, señaló que hace unos días el gobierno federal envió más camiones al municipio para esta tarea y, en el segundo, explicó que deben llevar el material hasta Tlaltizapán.

“Hemos tenido problemas para disponer de los residuos, se han tomado algunos lugares, pero son clandestinos, y tenemos la obligación de disponer del producto de las demoliciones en Santa Rosa 30. No podemos hacerlo en otros lugares y los camiones (sólo) se dan dos-tres vueltas, ahora los camiones tenían que ir mucho más lejos y entonces no se notó ese avance que nos podría haber dado (contar con más camiones para) retirar más escombros de la zona centro”.

Refirió que en números redondos el municipio tuvo afectación en dos mil 700 viviendas y negocios por el sismo del pasado 19 de septiembre.